Con la reciente llegada de más de 4 mil migrantes repatriados desde Estados Unidos, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, desmintió alarmas sobre un incremento desmedido en las cifras de deportación tras el ascenso de Donald Trump. En la conferencia matutina, la mandataria subrayó que el volumen de migrantes que han llegado en los últimos días responde a los patrones habituales registrados en el país.
“Queremos dejar en claro que, aunque es una cifra considerable, no estamos ante una crisis migratoria o un incremento fuera de lo común. Estamos trabajando de manera coordinada con las autoridades estadounidenses para garantizar una migración ordenada y la protección de los derechos humanos”, señaló Sheinbaum.
Coordinación México-EE.UU.: Clave para enfrentar el fenómeno migratorio
El gobierno mexicano mantiene comunicación constante con Estados Unidos. En una reciente llamada telefónica entre el titular de Relaciones Exteriores, Juan Ramón de la Fuente, y el secretario estadounidense Marco Rubio, se abordaron temas críticos como la seguridad fronteriza y la deportación de connacionales.
Sheinbaum resaltó que el objetivo principal es fortalecer las relaciones diplomáticas entre ambos países para garantizar la dignidad y derechos de los mexicanos repatriados.
“El diálogo con Estados Unidos es constante y prioritario. Nuestro enfoque está en proteger a nuestros connacionales y evitar posibles violaciones a los acuerdos internacionales en materia de migración”, destacó.
El desafío de la deportación masiva
Las políticas migratorias de Trump, conocidas por su rigidez, plantean desafíos importantes. El retorno masivo de migrantes puede implicar complicaciones económicas, sociales y logísticas para México. Por ello, el gobierno ha implementado estrategias como:
- Apoyo inmediato a los migrantes: Programas de reintegración social y laboral para garantizar una transición más sencilla.
- Coordinación interinstitucional: Colaboración entre el Instituto Nacional de Migración (INM) y la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE).
- Refuerzo de infraestructura: Incremento de recursos en albergues y puntos de apoyo fronterizos.
Atención a los derechos humanos
Sheinbaum enfatizó que su gobierno prioriza el respeto y la integridad de los repatriados. Las instituciones mexicanas trabajan para garantizar que cada migrante reciba atención adecuada al llegar al país. Además, se busca ofrecer opciones de integración laboral y social para quienes deseen permanecer en México.
“Estamos comprometidos con la protección de los derechos humanos. Nuestro gobierno no permitirá que los migrantes sean tratados de forma injusta, ni en México ni en Estados Unidos”, añadió.
Perspectiva hacia el futuro
El fenómeno migratorio es una realidad constante para México. Ante la incertidumbre por las políticas estadounidenses, el gobierno mexicano ha adoptado una postura firme, buscando el diálogo, la protección de los derechos humanos y la estabilidad social.
El mensaje de Sheinbaum subraya la importancia de mantener la calma, confiar en las instituciones y trabajar juntos para enfrentar los retos que presenta la relación migratoria entre México y Estados Unidos.
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