El Gobierno de la Ciudad de México anunció el inicio de un ambicioso programa de repavimentación que intervendrá 250 kilómetros de vialidades primarias a partir de octubre de 2025, una vez que concluya la temporada de lluvias. El plan busca atender el deterioro del pavimento y ofrecer soluciones más permanentes a la problemática de los baches, que se ha agudizado debido a las condiciones climáticas excepcionales de este año.

La jefa de Gobierno, Clara Brugada, informó que la estrategia forma parte de un plan de dos años que se extenderá hasta 2026, con una inversión estimada en 2 mil 250 millones de pesos.

Un problema agravado por las lluvias históricas

De acuerdo con la mandataria capitalina, los baches surgen principalmente porque la carpeta asfáltica envejecida desarrolla grietas que permiten la infiltración de agua de lluvia. Este proceso debilita la superficie y provoca el colapso del pavimento con el paso constante de vehículos.

En este 2025, la situación se ha intensificado debido a que la ciudad ha registrado los meses más lluviosos desde 1940, lo que ha generado un aumento considerable en el número de baches detectados en las vialidades.

Brugada subrayó que, aunque el bacheo diario ha sido fundamental para mitigar el problema, se trata de una solución temporal, mientras que la repavimentación integral representa la estrategia definitiva para mejorar la calidad y seguridad de las calles.

Inversión y alcance del programa

El proyecto intervendrá 250 de los 1,100 kilómetros de vialidades primarias que conforman la red principal de la CDMX. Para dimensionar la magnitud del plan, Brugada explicó que esta distancia equivale al trayecto entre la capital del país y el estado de Querétaro.

La inversión de 2 mil 250 millones de pesos se destinará a trabajos de repavimentación, sustitución de capas de rodamiento y mejoras estructurales, con el objetivo de prolongar la vida útil de las avenidas y reducir los costos de mantenimiento en el futuro.

Según la mandataria, la intervención se realizará de forma escalonada durante 2025 y 2026, priorizando las zonas con mayor tránsito vehicular y con afectaciones críticas en la superficie de rodamiento.

Balance de la administración en materia de vialidades

Desde el inicio de la actual administración, la Secretaría de Obras y Servicios ha ejecutado un programa permanente de mantenimiento en la red primaria.

Hasta ahora se han atendido 1 millón 27 mil metros cuadrados de vialidades, lo que equivale a miles de tramos rehabilitados en distintos puntos de la ciudad. Para estas acciones se han desplegado 500 trabajadores y 100 cuadrillas que laboran de manera nocturna, con el fin de reducir las afectaciones al tránsito.

En este periodo se han aplicado 250 mil toneladas de asfalto, con una inversión de 700 millones de pesos, enfocada en el bacheo y reparaciones inmediatas. Sin embargo, la jefa de Gobierno remarcó que la nueva etapa de repavimentación representa un cambio de enfoque hacia soluciones de mayor durabilidad.

El reto de atender los baches en la CDMX

El bacheo ha sido uno de los principales reclamos ciudadanos en la capital, ya que afecta la movilidad, daña los vehículos y aumenta los riesgos de accidentes. De acuerdo con la experiencia de años anteriores, las temporadas de lluvias suelen generar un repunte de reportes en las 16 alcaldías.

La nueva estrategia busca no solo responder a la urgencia inmediata, sino ofrecer un plan de largo plazo que reduzca la recurrencia del problema. Según Brugada, el “bachetón” atenderá avenidas principales, pero también servirá para fortalecer la capacidad de respuesta ante el deterioro futuro.

El anuncio del bachetón en 250 km de vialidades primarias representa un paso decisivo en el mantenimiento de la infraestructura de la Ciudad de México. Con una inversión histórica de 2 mil 250 millones de pesos y un plan de ejecución a dos años, el gobierno capitalino apuesta por soluciones permanentes que vayan más allá del bacheo cotidiano.

Aunque la ciudad enfrenta un reto mayúsculo por el impacto de las lluvias históricas, la estrategia pretende ofrecer a los capitalinos calles más seguras, funcionales y duraderas, garantizando una movilidad más eficiente en una de las metrópolis más transitadas del mundo.