El tráfico de armas ilegales provenientes de Estados Unidos ha alimentado la violencia en México durante décadas. Según un informe reciente de la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF), el 74% de las armas recuperadas en crímenes en México tienen su origen en el país vecino. Este fenómeno, que involucra estados clave como Texas, Arizona y California, está en el centro de un conflicto diplomático que exige acción conjunta.
Estados clave en el tráfico de armas hacia México
El informe de la ATF señala que Texas es el principal estado proveedor de armas para los cárteles mexicanos, aportando el 43% del total entre 2022 y 2023. Arizona contribuye con un 22%, mientras que California representa el 9%. Estas entidades funcionan como epicentros del tráfico, con rutas bien establecidas hacia puntos estratégicos en México como Tamaulipas, Nuevo León, Chihuahua y Guanajuato.
Además, las armas terminan principalmente en manos de los cárteles de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación (CJNG), que operan en las regiones más conflictivas del país.
Tipos de armas más traficadas y su impacto en México
Entre las armas recuperadas en México, las pistolas Glock de 9 mm lideran la lista, con más de 2,000 unidades incautadas en los últimos dos años. Los rifles de asalto, utilizados frecuentemente en enfrentamientos, representan el 33% de las armas decomisadas, mientras que las pistolas abarcan el 50%.
Estas armas no solo alimentan la violencia, sino que también proporcionan un nivel de poder de fuego sin precedentes, poniendo en jaque a las fuerzas de seguridad mexicanas y a la población civil.
Obstáculos en el rastreo de armas
El fiscal Alejandro Gertz Manero denunció que los sistemas de control de armas en Estados Unidos dificultan el rastreo de armas traficadas. Las demoras de hasta varios meses para responder solicitudes de información complican los esfuerzos de México para frenar este problema.
A pesar de la evidencia contundente presentada por México, las limitaciones legales en Estados Unidos y la falta de cooperación han sido barreras constantes.
Propuestas para combatir el tráfico de armas
Durante una conferencia de prensa, la presidenta Claudia Sheinbaum enfatizó la necesidad de una colaboración más estrecha entre México y Estados Unidos. Por primera vez, el Departamento de Justicia de EU reconoció oficialmente el problema del tráfico de armas hacia México, lo que abre una puerta para futuras negociaciones.
Donald Trump, en tanto, ha propuesto clasificar a los cárteles mexicanos como organizaciones terroristas, una medida que México rechaza, pero que podría tener implicaciones en los esfuerzos bilaterales para combatir el tráfico de armas y drogas.
Un desafío binacional urgente
El tráfico de armas no solo es un problema de seguridad para México, sino también una prueba de las relaciones bilaterales con Estados Unidos. La evidencia proporcionada por la ATF y los esfuerzos de figuras como Claudia Sheinbaum y Alejandro Gertz Manero subrayan la necesidad de actuar de manera conjunta y decisiva para enfrentar este problema.
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