Maestros y personal administrativo de las escuelas públicas y privadas de Quintana Roo serán capacitados en la prevención e identificación de trastornos mentales entre los alumnos, gracias a una iniciativa para modificar la Ley de Educación del Estado.
La propuesta impulsada por el diputado del Partido del Trabajo, Hugo Alday, destaca la importancia de capacitar al personal educativo para enfrentar el creciente problema de la salud mental entre los estudiantes.
De acuerdo con el legislador, las aulas, donde los menores pasan gran parte de su tiempo, son espacios clave para identificar y abordar oportunamente trastornos emocionales y conductuales que afectan su bienestar.
“La salud mental en las niñas, niños y adolescentes de Quintana Roo, es un problema que crece cada vez más en nuestra sociedad y que afecta gravemente a este sector de la población donde las estadísticas son alarmantes, ya que ocasiones el desenlace es fatal y terminan en el suicidio.
“Las escuelas públicas y privadas en todos los niveles escolares, son uno de los puntos donde se deben reforzar las acciones para atender la salud mental de miles de estudiantes que sufren depresión o ansiedad”, dijo.
Un trabajo en colaboración
La propuesta establece que la Secretaría de Educación local, junto a los Servicios Estatales de Salud (Sesa) deberán diseñar programas de capacitación orientados a la identificación de señales de alerta en los estudiantes y a partir de ello, seguir el protocolo de atención a sus salud mental a través del personal especializado de la dependencia de salud.
“Queremos capacitar al personal docente y administrativo para que puedan desarrollar las herramientas que les permitan detectar y atender en primera instancia alguna situación socio emocional que se presenta en el alumnado.
“Sabemos que la depresión no es sencilla de diagnosticar, ya que los adultos normalizamos varias conductas como el estrés, las fobias, la ansiedad y las minimizamos porque no hay pruebas de laboratorio o radiografías que lo comprueben. Sin embargo, existen señales o factores de riesgo que pueden ser factores protectores para prevenir el suicidio infantil y adolescentes”, comentó el diputado.
Agregó que, desde el aislamiento provocado por la pandemia de covid-19, se ha registrado un aumento en trastornos mentales como estrés, ansiedad, depresión y consumo de sustancias entre menores de edad, por lo que es necesario abordarlos de manera inmediata y efectiva.
“Debemos entender que los problemas mentales en niñas, niños y adolescentes, ya es un tema de salud pública que se agrava cada vez más, por eso urge realizar acciones para que puedan detectar y atender síntomas de problemas de salud mental, en el primer nivel de atención”, dijo.
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