La celebración del **108 aniversario de la promulgación de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos ha generado controversia este 2025, debido a la ausencia de la ministra presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Norma Piña Hernández, en la ceremonia.
La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, quien encabeza la conmemoración, decidió no invitar a Piña, lo que ha avivado las tensiones ya existentes entre el Ejecutivo y el Poder Judicial. Esta situación resalta las diferencias que, desde hace tiempo, han caracterizado las relaciones entre el Gobierno de México y la SCJN, marcadas por episodios como el que ocurrió en febrero de 2023, cuando Piña no se levantó al saludo de Andrés Manuel López Obrador, entonces presidente.
La ausencia de Piña en un evento tan importante ha generado una ola de críticas, principalmente desde la oposición, que considera que esta acción atenta contra la división de poderes y el respeto a la Constitución. Sin embargo, Sheinbaum ha defendido su decisión al asegurar que la Corte también debe respetar al Ejecutivo y al Legislativo, alegando que esta medida se enmarca dentro de la falta de respeto mutuo entre los poderes.
La postura de Sheinbaum y el rechazo a la SCJN
La decisión de la mandataria de no invitar a Norma Piña a la ceremonia del aniversario de la Constitución fue justificada por Claudia Sheinbaum durante la mañanera del 4 de febrero, al declarar que “la Corte también debe respetar al Ejecutivo y al Legislativo y debe respetar a la Constitución”.
¡Únete a nuestro canal en WhatsApp! Las noticias más relevantes del día directamente en tu dispositivo móvil.Con estas palabras, Sheinbaum subrayó que la relación entre ambos poderes debe ser de respeto mutuo y que la falta de invitación no responde a una actitud personal, sino a una acción relacionada con la falta de respeto por parte de la SCJN en varias ocasiones previas.
Según la presidenta, el evento debía ser exclusivamente del Ejecutivo, debido a las diferencias mantenidas, especialmente el incidente ocurrido en el 5 de febrero de 2023, cuando Piña no se puso de pie al saludo de López Obrador. Este hecho fue percibido como una actitud desafiante por parte de la presidenta de la SCJN hacia el Ejecutivo, lo que marcó el inicio de una escalada de tensiones.
Además, trascendió que Sheinbaum invitó a las tres ministras afines al oficialismo, Lenia Batres Guadarrama, Loretta Ortiz Ahlf y Yasmín Esquivel Mossa, lo que se interpretó como una medida para llenar el vacío dejado por la ausencia de Piña, y reforzar la presencia de aliados en el evento.
Críticas desde la oposición y analistas políticos
La ausencia de Piña no pasó desapercibida y desató una serie de críticas por parte de la oposición y varios analistas políticos. Francisco Burgoa, un reconocido abogado, expresó que la decisión de Sheinbaum representa una afrenta directa a la República y a la división de poderes, fundamentales para la democracia en México.
Burgoa denunció que el acto que originalmente debía representar una conmemoración de unidad se convirtió en una estrategia de apropiación política por parte de Morena, buscando invisibilizar al Poder Judicial y de paso restarle importancia a la labor de la Corte.
Uno de los opositores más vocales, el ex experredista Fernando Belauzarán, calificó la decisión de Sheinbaum como una “grosería innecesaria e injustificable” y un ataque directo a la independencia judicial.
En redes sociales, Belauzarán expresó que esta acción no solo era un desprecio hacia Piña, sino que también heredaba las fobias de López Obrador, quien siempre mostró su desprecio hacia la SCJN. Para Belauzarán, la ausencia de la ministra en un acto tan simbólico como el del aniversario de la Constitución no solo fue un error, sino también una muestra de desdén hacia las instituciones democráticas de México.
Otros críticos, como Emilio Álvarez Icaza, exsenador y exsecretario ejecutivo de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), también cuestionaron el gesto, señalando que Sheinbaum no podía pedir unidad mientras excluía a una figura clave de la independencia judicial. Álvarez Icaza criticó el hecho de que el evento, que debería ser una celebración del país y sus instituciones, se transformara en un acto de exclusión política.
Respuestas de las panistas y la crítica al desprecio por la división de poderes
Entre las figuras de la oposición panista, se destacó el pronunciamiento de Kenia López Rabadán, quien le recordó a Sheinbaum que su lema de “llegamos todas” debía aplicarse en estos casos, instando a la presidenta a corregir lo que consideró una exclusión injusta. López Rabadán sugirió que, al no invitar a Piña, Sheinbaum estaba violando uno de los principios que se suponía defendía: el respeto por las mujeres en la política.
En este contexto, Mariana Gómez del Campo, también panista, opinó que la falta de la ministra presidenta en la ceremonia era un insulto a la división de poderes y un acto de desprecio al Poder Judicial por parte del Ejecutivo.
Ambas críticas coincidieron en que esta exclusión refleja un desdén por los principios fundamentales de la democracia y la separación de poderes, pilares esenciales del sistema político mexicano.
El papel del Poder Judicial y el contexto de las tensiones políticas
La tensión entre el Ejecutivo y la SCJN ha sido una constante durante la administración de López Obrador y, más recientemente, bajo la presidencia de Sheinbaum. La relación entre ambos poderes ha estado marcada por diferencias de interpretación constitucional y de competencia judicial, lo que ha generado un clima de desconfianza y enfrentamiento.
Desde la reforma electoral de 2022 hasta las diversas decisiones de la SCJN que han sido vistas por el Ejecutivo como obstáculos a sus políticas, las diferencias ideológicas entre ambos poderes se han hecho más evidentes.
La ausencia de Norma Piña en la ceremonia de la Constitución refleja una nueva etapa en estas tensiones, en la que la falta de diálogo y respetuosa convivencia entre los poderes pone en riesgo la unidad nacional que se esperaba fortalecer en un acto conmemorativo de la Carta Magna.
Conclusión: Un acontecimiento que marca una nueva etapa de tensiones entre poderes
La ausencia de Norma Piña en la conmemoración del aniversario de la Constitución es mucho más que una decisión protocolaria. Este evento subraya las profundas tensiones políticas entre el Ejecutivo y el Poder Judicial, tensiones que podrían tener consecuencias en el futuro cercano.
Claudia Sheinbaum, al excluir a Piña, marca una ruptura con la tradición democrática de respeto entre los tres poderes, y alimenta un ambiente de confrontación que, según los críticos, pone en peligro los cimientos mismos de la democracia mexicana.
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