Cada rincón de la Laguna de Bacalar guarda una historia. Sus aguas cristalinas y tonalidades turquesa han sido testigos del paso del tiempo, pero también de la huella humana. La acumulación de residuos es un problema que no se puede ignorar, y este 21 de marzo, en el marco del Día Mundial del Agua, se realizará una jornada de limpieza para devolverle a este ecosistema su esplendor.
Entre los desechos que se han encontrado en la laguna y sus alrededores destacan plásticos de un solo uso, colillas de cigarro, latas, botellas de vidrio y aluminio, llantas abandonadas e incluso electrodomésticos en mal estado. Además, la contaminación orgánica derivada de aguas residuales y fertilizantes representa un riesgo silencioso para el equilibrio del ecosistema.
La importancia de la Laguna de Bacalar va más allá de su belleza escénica. Se trata de un ecosistema único en el mundo, hogar de los estromatolitos, estructuras biológicas ancestrales que contribuyen a la producción de oxígeno y que requieren de aguas limpias para sobrevivir. Además, la laguna es un refugio para una gran diversidad de flora y fauna, incluidos peces endémicos y aves migratorias.
Ante esta realidad, la gobernadora de Quintana Roo, Mara Lezama, convocó a la ciudadanía a sumarse a la limpieza programada para el viernes 21 de marzo a las 9:30 a. m. en el Parque Ecológico de Bacalar. “Les invitamos a participar en la limpieza de la Laguna de Bacalar. Lleven guantes y termo reutilizable. ¡Cada acción cuenta!”, expresó la mandataria en sus redes sociales.
¿Por qué se celebra el Día Mundial del Agua?
El Día Mundial del Agua, celebrado cada 22 de marzo desde 1993, es una iniciativa de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para concienciar sobre la importancia del agua dulce y su gestión sostenible. Este año, la efeméride cobra especial relevancia en Quintana Roo, donde la crisis hídrica y la contaminación de cuerpos de agua han puesto en alerta a la comunidad.
TE PODRÍA INTERESAR