En una visita al Centro de Reinserción Social (Cereso) de Mérida, el gobernador Joaquín Díaz Mena destacó la importancia de las actividades culturales y programas de capacitación para transformar la vida de las personas privadas de la libertad. Acompañado de su esposa, la maestra Wendy Yamile Méndez Naal, presenció la puesta en escena de El Gran Showman, una obra teatral protagonizada por internos, que representa el poder del arte como herramienta de reconstrucción social.
“La reinserción social no solo cambia vidas dentro de los muros de estos centros, sino que también construye un Yucatán más humano y solidario. Estas iniciativas no son un gasto, son una inversión en nuestra sociedad”, expresó Díaz Mena, tras aplaudir la dedicación de los actores y del equipo que impulsa estas actividades.
En el Cereso de Mérida, la reinserción social no se limita a lo cultural; también se fortalecen programas de capacitación laboral y talleres que preparan a los internos para su eventual regreso a la sociedad, con lo que se busca romper el ciclo de reincidencia y ofrecer segundas oportunidades.
Estadísticas que respaldan el cambio
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Gobierno, Seguridad Pública y Sistema Penitenciario del INEGI 2023, Yucatán cuenta con cinco centros penitenciarios que albergan una capacidad instalada de 3,194 camas. Actualmente, sólo el 54.5% de ese espacio está ocupado. Sin embargo, un dato preocupante es que el 65.2% de la población penitenciaria permanece en prisión preventiva oficiosa, sin una sentencia que defina su situación jurídica.
Durante 2023, el estado destinó 286.4 millones de pesos para el mantenimiento y operación de sus centros penitenciarios, incluyendo el centro especializado. Una parte de este presupuesto ha permitido el desarrollo de proyectos como el teatro, la música, y talleres de carpintería y costura, que son hoy el orgullo de quienes luchan por un nuevo comienzo.


TE PODRÍA INTERESAR