La relación comercial entre Canadá y México, históricamente aliada y sólida, se vio sacudida a finales del año pasado debido a desacuerdos relacionados con la política comercial del expresidente Donald Trump. Mark Carney, primer ministro canadiense, ha comenzado un esfuerzo diplomático para reparar los daños, luego de que funcionarios canadienses mostraran preferencia por negociar un acuerdo solo con Trump, dejando de lado a México.
La situación escaló cuando el primer ministro de Ontario, Doug Ford, realizó comentarios ofensivos que agudizaron las tensiones. Claudia Sheinbaum, presidenta mexicana, respondió con una firme postura, llegando a ordenar a sus funcionarios pausar la comunicación con sus contrapartes canadienses hasta que Trudeau dejara el cargo.
El valor del TMEC para Canadá y México
Pese a las diferencias, Canadá y México comparten un legado de cooperación en comercio que data desde el TLCAN en 1994, y que se renovó en 2020 con el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (TMEC). Este acuerdo trilateral protege miles de millones en exportaciones y es fundamental para sectores clave, como el automotriz y manufacturero.
Sin embargo, el camino no ha sido sencillo: las tensas negociaciones de 2018 pusieron a prueba la alianza, y México tuvo que intervenir para mantener el tratado trilateral cuando Canadá y Estados Unidos se mostraban a punto de cerrar un acuerdo bilateral sin su participación.
Aranceles y la lucha por mantener la alianza comercial
Las diferencias se profundizaron cuando Trump impuso aranceles más altos a Canadá (35%) que a México (25%), evidenciando una preferencia política y económica que ha complicado la relación entre Ottawa y Ciudad de México.
En respuesta, Carney y la ministra canadiense de Asuntos Exteriores, Anita Anand, han viajado a México para fortalecer los lazos y asegurar que las medidas de Canadá no afecten las importaciones mexicanas, mostrando voluntad para reparar la confianza y consolidar el TMEC como pilar económico.
Un futuro compartido: la importancia de la alianza México-Canadá
Analistas destacan que una alianza renovada y fuerte entre México y Canadá no solo beneficia a ambos países, sino que es crucial para enfrentar los retos en negociaciones con Estados Unidos. Aunque persisten diferencias, las señales de acercamiento, como la invitación a Sheinbaum a la cumbre del G7 en Canadá y las conversaciones recientes, reflejan un deseo mutuo de colaborar y fortalecer el bloque trilateral.
La renovación del TMEC es clave: si no se renueva antes de su expiración en 2036, la región podría sufrir consecuencias económicas graves. México, en particular, rechaza un posible acuerdo bilateral entre EE.UU. y México que excluya a Canadá, pues considera que la fuerza está en la unión.
Una relación que debe mirarse al espejo
Las tensiones pasadas, los desacuerdos y los dimes y diretes entre funcionarios han dejado una huella en la relación, pero la historia y la economía obligan a mirar hacia adelante. Canadá y México saben que deben superar diferencias para no perder el espacio competitivo en Norteamérica, buscando una cooperación basada en la confianza, el respeto y el beneficio mutuo.
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