Los diputados de la Legislatura 18 del Congreso de Quintana Roo están a punto de regresar a sus curules para reanudar sus actividades legislativas, después de un receso de 62 días. Con un nuevo presupuesto asignado por el Gobierno Estatal, se estima que el trabajo de cada uno de los legisladores durante este año tendrá un costo de 21 millones de pesos para el estado.
En su calidad de presidente del Observatorio Legislativo de Quintana Roo, Eduardo Galviz informó que, este año el presupuesto proyectado para las actividades legislativas del Congreso estatal ascenderá a 760 millones de pesos. Esta cifra lo ubica como uno de los congresos más costosos del país, especialmente, por el alto costo asociado al trabajo de cada legislador.
“Es uno de los más caros por la cantidad de recursos que se asignan y el número de diputados con los que se cuenta en relación a la población y al número de municipios que tenemos en el estado.
“Para este año, el presupuesto asignado es de 760 millones 863 mil 984 pesos, de los cuales 228 millones estarán destinados a la Auditoría Superior del Estado, lo que deja un presupuesto exclusivo para el Congreso de 532 millones de pesos. Entre los 25 diputados, estamos hablando de un costo promedio anual de más de 21 millones de pesos por cada uno”, dijo.
Aunque se intenta justificar este elevado costo con la cantidad de empleados y funcionarios que laboran en el Congreso, Eduardo Galaviz advirtió que existen otras partidas no contempladas en esta cifra, las cuales podrían incrementar aún más el monto total proyectado.
“Están excedidos en empleados respecto a otros Congresos estatales. Tampoco se habla sobre las prestaciones que tiene cada uno de los diputados, además de su sueldo o “dieta” reciben 100 mil pesos mensuales como apoyos a sus casas de gestión.
“Tienen un fondo de ahorro que supuestamente aportan, pero en realidad es financiado por el Congreso con 20 mil pesos mensuales por diputado. Al final de cada periodo legislativo, reciben otros 20 mil adicionales”, señaló.
Diputados caros y poco productivos
El elevado costo de cada diputado no es el único problema identificado en el Congreso de Quintana Roo; también se señala la falta de una correlación justa entre el gasto y la productividad legislativa.
De acuerdo con Eduardo Gavaliz, esto quedó evidenciado durante su primer periodo de sesiones, de septiembre a diciembre de 2024, donde los resultados fueron menores a la inversión realizada.
“En su primer periodo de sesiones se lograron 83 decretos en 38 sesiones, es decir 38 días de los cuatro meses del periodo. Si hacemos una correlación del presupuesto correspondiente a este primer periodo de sesiones, que es cerca de 140 millones de pesos, asumimos que cada decreto emitido en este periodo nos ha costado cerca de 2 millones de pesos”, dijo.
Agregó que, durante este periodo, se presentaron 105 iniciativas, de las cuales solo 31 fueron propuestas individuales de 14 de los 25 diputados, lo que equivale al 56% de los legisladores con aportaciones propias.
Las proyecciones del observatorio para este año indican un panorama similar al actual. Con 21 millones de pesos asignados a cada diputado anualmente, lo que equivale a aproximadamente 1 millón 759 mil pesos mensuales, estos ingresos superan 209 veces el salario promedio de un mexicano, estimado en 8,364 pesos al mes.
“El Congreso del Estado sigue teniendo una opacidad absoluta en su manejo presupuestal y ahora con la desaparición del INAI y del Idaipqroo, se complicará aún más el que podamos conocer con detalle, el manejo presupuestal de esta gran caja de beneficios que se ha convertido el Congreso para la clase política de Quintana Roo”, expresó.
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