Un asesinato que sacude al Instituto Nacional de Migración
El Instituto Nacional de Migración (INM) vive un momento crítico tras el asesinato de Luis Alberto “O”, un agente migratorio con 30 años de servicio. El ataque ocurrió en un puesto de control ubicado en Ciudad Juárez, Chihuahua, cuando el servidor público solicitó documentos a un grupo de migrantes.
El crimen, ocurrido el 30 de diciembre, ha despertado cuestionamientos sobre la seguridad de los agentes del INM y los riesgos que enfrentan al realizar su trabajo.
Los hechos: una agresión mortal en Samalayuca
El ataque tuvo lugar cerca de las 12:30 horas en el puesto de control Precos-Samalayuca, un área escarpada en las afueras de Ciudad Juárez. Según el INM, Luis Alberto fue agredido por personas extranjeras cuando pidió documentación en regla.
Horas más tarde, el cuerpo del agente fue encontrado con una herida grave en la cabeza y rastros de sangre. Los reportes iniciales sugieren que el ataque fue realizado con piedras, lo que indica un nivel de violencia extremo contra el servidor público.
Detenciones rápidas y un operativo coordinado
Poco antes de las 16:00 horas, un operativo conjunto entre fuerzas federales, estatales y municipales permitió la detención de tres hombres, identificados como: Ismael “N” y Carlos “N”, ambos de Venezuela, y Carlos “N” de Colombia.
Estos individuos han sido señalados como los presuntos responsables del asesinato. Actualmente, enfrentan procesos judiciales tras la apertura de una carpeta de investigación.
Migración bajo presión: los riesgos de un sistema colapsado
El asesinato de Luis Alberto “O” no es un hecho aislado; refleja la creciente violencia en los puntos de control migratorio en la frontera norte de México. En un contexto donde el flujo migratorio ha alcanzado niveles históricos, los agentes del INM enfrentan un riesgo constante.
La labor de los agentes no solo implica la verificación de documentos, sino también la detección de tráfico humano y la asistencia a migrantes en condiciones precarias. Sin embargo, la falta de recursos y la tensión en los puntos de control han incrementado los enfrentamientos entre autoridades y migrantes desesperados por llegar a Estados Unidos.
Operativo de rescate en Chihuahua: 257 migrantes rescatados
En paralelo al asesinato, otro operativo migratorio en Chihuahua permitió el rescate de 257 migrantes que viajaban hacinados en un camión con destino a Estados Unidos. Este rescate destaca la complejidad de la crisis migratoria y el peligro al que se enfrentan quienes buscan mejores oportunidades.
El INM informó que estas personas fueron puestas a disposición de las autoridades migratorias para determinar su situación legal.
Reacciones: indignación y llamados a la justicia
El Instituto Nacional de Migración emitió un comunicado condenando enérgicamente el ataque y exigiendo justicia para el agente asesinado. En redes sociales, usuarios manifestaron su solidaridad con la familia de Luis Alberto y señalaron la necesidad de mayor protección para los trabajadores migratorios.
“El INM condena la agresión extrema contra un Agente Federal de Migración en Chihuahua”, se lee en su página oficial.Por otro lado, organizaciones civiles han señalado que el caso evidencia la urgencia de abordar las políticas migratorias con un enfoque más humano y seguro.
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