En Mérida, Yucatán, un reto viral en redes sociales estuvo a punto de convertirse en tragedia. Dante, un niño de apenas 7 años, sufrió quemaduras graves en el 40 % de su cuerpo tras intentar imitar el peligroso “Fire Challenge”, una dinámica que circula en plataformas digitales y que ya ha causado víctimas en distintos países.
El incidente ocurrió el 28 de agosto en la colonia Amapola. En un inicio, las autoridades no tenían certeza sobre el origen de las heridas, pero el 4 de septiembre se confirmó que el accidente estaba relacionado con este reto en internet.
Una carrera contra el tiempo por salvar su vida
De acuerdo con Anne Vilchis, delegada de la Fundación Michou y Mau en Yucatán, Dante se encontraba en el baño de su casa cuando tomó un encendedor y una botella de alcohol en gel. En su intento por replicar el reto, encendió la botella y fue alcanzado por las llamas.
El pequeño fue trasladado a una clínica local, pero debido a la gravedad de sus lesiones se decidió enviarlo al Hospital Shriners Children’s en Galveston, Texas, especializado en quemaduras pediátricas. Allí, ya fue sometido a cirugía y los médicos evalúan la posibilidad de injertos de piel para su recuperación.
¿Qué es el “Fire Challenge”?
El “Fire Challenge” consiste en rociarse con alcohol, encender el cuerpo y apagar las llamas con agua. Lo que parece un juego en redes sociales se convierte en una práctica de alto riesgo: múltiples adolescentes en el mundo han resultado heridos o incluso fallecido al intentar este desafío.
Especialistas advierten que este tipo de retos generan quemaduras severas, afectaciones respiratorias e incluso la muerte, por lo que es fundamental alertar a niños, adolescentes y padres de familia sobre el peligro.
Llamado urgente a la prevención digital
El caso de Dante ha conmovido a la comunidad yucateca y ha encendido las alarmas en México. Usuarios en redes sociales han expresado solidaridad con la familia y han exigido campañas de prevención más contundentes para frenar la propagación de estos desafíos.
Expertos recomiendan a los padres mantener una supervisión constante del contenido digital que consumen los menores, promover la educación digital y dialogar abiertamente sobre los riesgos de las redes sociales.
Mientras tanto, Dante continúa hospitalizado en Estados Unidos, enfrentando un largo y complejo proceso médico que podría incluir múltiples cirugías para salvar su vida.
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