La administración de Donald Trump prepara una serie de pasos formales para iniciar en octubre la renegociación del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC). La medida llega en un contexto de tensiones comerciales y la reciente imposición de aranceles a productos importados de sus socios norteamericanos, lo que ha generado alerta entre empresas y sindicatos de la región.
Según The Wall Street Journal, Jamieson Greer, Representante de Comercio de Estados Unidos, liderará el proceso. Su misión será abrir un periodo de consultas públicas antes del 4 de octubre, donde participarán actores clave del sector empresarial y laboral, tal como lo establece el propio tratado.
Cronograma y expectativas para 2026
El proceso de renegociación se perfila extenso y complejo. Se prevé que las discusiones se prolonguen durante varios meses, con una audiencia pública en el Congreso estadounidense programada para enero de 2026. Posteriormente, los tres países celebrarán una reunión trilateral el 1 de julio de 2026, con el objetivo de revisar y ajustar los términos del T-MEC.
Aranceles y medidas unilaterales de EEUU
El T-MEC, vigente desde 2020, sustituyó al Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN). Aunque Trump apoyó su firma, en su segundo mandato criticó el acuerdo, argumentando que perjudica los intereses estadounidenses. Estas críticas derivaron en aranceles del 25% a importaciones de Canadá y México, principalmente acero y aluminio, esenciales para la industria automotriz, un ejemplo clave de integración productiva trinacional.
Diplomacia y factores clave de la renegociación
En el plano diplomático, Trump dialogó con el primer ministro canadiense Mark Carney, quien destacó “progresos” en las conversaciones. Asimismo, el secretario de Estado Marco Rubio y la presidenta mexicana Claudia Sheinbaum abordaron temas arancelarios y de comercio bilateral.
Un elemento crucial será alcanzar consensos en materia de seguridad y combate al narcotráfico. Solo tras acuerdos en este ámbito se considerarán modificaciones comerciales de mayor alcance.
Impacto en México, Canadá y Estados Unidos
La renegociación del T-MEC no solo busca ajustar los términos comerciales, sino también reforzar la cooperación trinacional en sectores estratégicos. Las decisiones que se tomen en los próximos meses definirán el futuro de la integración productiva en Norteamérica y la estabilidad de sectores clave como la industria automotriz, acero y aluminio.
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