La familia de un hombre de 31 años que murió en un violento choque en Nueva York exige justicia tras la aparición de un video que muestra a una patrulla del NYPD llegando a la escena y abandonándola sin prestar auxilio. Dos oficiales han sido suspendidos.
Un trágico incidente en el vecindario de Inwood, en Manhattan, ha desatado una profunda controversia y un clamor por justicia, después de que un video de seguridad revelara que oficiales del Departamento de Policía de Nueva York (NYPD) presuntamente abandonaron la escena de un choque mortal sin prestar ayuda a la víctima.
Francisco Andres Guzman Parra, de 31 años, falleció en la madrugada del 2 de abril después de que el vehículo que conducía, reportado como robado, se estrellara violentamente contra un edificio en la calle Dyckman y se incendiara. El incidente ocurrió tras una persecución policial que, según el NYPD, no estaba autorizada.
El video que desató la indignación
La pieza central de la controversia es un video captado por una cámara de seguridad. En las imágenes se observa cómo, momentos después del impacto, una patrulla del NYPD llega al lugar del accidente, se detiene brevemente y luego se retira, dejando a Guzman Parra dentro del vehículo en llamas.
La familia de la víctima, devastada, denuncia que los oficiales lo dejaron morir. «Alguien estuvo allí, vio el accidente y lo dejaron allí. Eso es horrible», declaró Carmen Colon, la madrastra de Guzman Parra. «Si robó el coche o no, que lo arresten, pero que lo lleven a recibir ayuda primero».
La versión de la familia: Miedo a la deportación
La familia de Guzman Parra, quien nació en la República Dominicana, cree que su miedo a ser deportado pudo haber sido la razón por la que huyó de la policía. «Tenía miedo de que lo detuvieran», dijo Colon. Esta perspectiva añade una capa de complejidad al caso, conectándolo directamente con el temor que viven muchos inmigrantes en sus interacciones con las fuerzas del orden.
La familia también denunció que tardaron una semana en recibir respuestas de las autoridades sobre el paradero de Francisco, a pesar de haber notificado su desaparición.
«Estos policías no deberían ser suspendidos, deberían ser despedidos. Si yo me fuera de la escena de un accidente de coche, me arrestarían.» – Carmen Colon, madrastra de Francisco Guzman Parra.
La respuesta del NYPD
El NYPD ha confirmado que dos de sus oficiales fueron suspendidos por violar las regulaciones del departamento al participar en una persecución no autorizada y, crucialmente, por no reportarla después.
La División de Investigación de la Fuerza del departamento está revisando el incidente, y la oficina del Fiscal General del estado también ha abierto una investigación. Sin embargo, la falta de una declaración más contundente por parte de la cúpula policial ha avivado las críticas de la familia y la comunidad.
El caso plantea una pregunta ética fundamental sobre el deber de la policía: ¿la sospecha de un delito anula la obligación de preservar una vida? Para la familia de Francisco Guzman Parra, la respuesta es clara, y su lucha por la rendición de cuentas apenas comienza.
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