En una operación nacional denominada «Game Over», el FBI y la DEA han desarticulado una red transnacional de fentanilo vinculada a cárteles mexicanos que utilizaba plataformas de videojuegos en línea para contactar y vender drogas a menores de edad.
El Departamento de Justicia anunció hoy el desmantelamiento de una de las redes de distribución de fentanilo más sofisticadas y alarmantes descubiertas hasta la fecha. En una operación coordinada a nivel nacional, bautizada como «Game Over», agentes del FBI y la DEA arrestaron a más de 50 individuos en 12 estados, acusados de traficar fentanilo y otras drogas sintéticas utilizando una metodología sin precedentes: los chats de voz y texto dentro de populares videojuegos en línea.
La investigación, que duró más de 18 meses, destapó cómo la organización, con vínculos directos con el Cártel de Sinaloa, se infiltraba en comunidades de jugadores en línea para reclutar distribuidores de bajo nivel y vender directamente a consumidores, muchos de ellos adolescentes y jóvenes adultos.
El Modus Operandi: De la Consola a la Calle
Según los documentos judiciales, la red explotaba el anonimato y la falta de moderación de las plataformas de comunicación de los videojuegos. Los traficantes se unían a partidas multijugador y utilizaban la jerga de los juegos para ofrecer las drogas de forma encubierta.
* Reclutamiento: Identificaban a jugadores jóvenes, a menudo con problemas económicos, y les ofrecían dinero fácil para actuar como «mulas» o distribuidores locales. La comunicación inicial se realizaba a través del chat del juego.
* Venta Directa: Utilizaban códigos y frases clave para ofrecer los productos. Por ejemplo, «potenciadores de salud» o «kits de energía extra» eran eufemismos para las píldoras de fentanilo.
* Transacciones Anónimas: Una vez establecido el contacto, la conversación se trasladaba a aplicaciones de mensajería encriptada como Telegram o Signal. Los pagos se realizaban a través de criptomonedas o aplicaciones de pago móvil como Cash App y Venmo, utilizando cuentas robadas o de terceros para dificultar el rastreo.
* Entrega «Dead Drop»: La droga se entregaba a través de métodos de «entrega muerta», dejándola en lugares públicos discretos como parques, baños de centros comerciales o detrás de contenedores de basura, para evitar el contacto directo entre vendedor y comprador.
El Alcance de la Operación y las Víctimas
La operación «Game Over» se extendió por estados como California, Texas, Florida, Ohio y Nueva York. Las autoridades incautaron más de 10 millones de píldoras de fentanilo falsificadas, a menudo disfrazadas de analgésicos recetados como oxicodona o Percocet. El Fiscal General Merrick Garland destacó en la conferencia de prensa la naturaleza depredadora de la red.
«Estos traficantes no solo envenenaron nuestras comunidades, sino que convirtieron espacios que nuestros hijos consideraban seguros, como los videojuegos, en mercados de drogas mortales. No hay escondite para aquellos que se aprovechan de los más vulnerables». – Fiscal General Merrick Garland.
La investigación se inició tras una serie de sobredosis mortales en adolescentes en el área de Cleveland, Ohio. Los investigadores forenses encontraron conversaciones en las consolas de videojuegos de las víctimas que los llevaron a descubrir la vasta red.
Una Nueva Frontera en la Lucha Antidrogas
Este caso marca un punto de inflexión para las agencias del orden, que ahora deben enfrentar el desafío de monitorear y combatir la actividad criminal en el vasto y no regulado universo del gaming en línea. Expertos en ciberseguridad señalan que las compañías de videojuegos tienen una responsabilidad creciente en la moderación de sus plataformas.
La operación subraya la continua evolución de los cárteles de la droga, que adaptan rápidamente las nuevas tecnologías para sus fines ilícitos. La crisis del fentanilo, que ya se cobra decenas de miles de vidas al año en EE.UU., ha encontrado un nuevo y aterrador canal de distribución que llega directamente a los dormitorios de los jóvenes estadounidenses.
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