Un nuevo y controvertido centro de detención de inmigrantes, apodado «Alligator Alcatraz», ha comenzado a operar en los Everglades de Florida, recibiendo a sus primeros detenidos mientras 200 marines de EE.UU. son desplegados en el estado para apoyar a ICE.
El sur de la Florida se ha convertido en el epicentro de la nueva y endurecida política migratoria de la administración Trump con la apertura de un polémico centro de detención en los Everglades y el despliegue de personal militar para apoyar las operaciones de inmigración. La medida ha encendido las alarmas entre activistas y legisladores, quienes denuncian una creciente militarización de la gestión migratoria.
Llegan los Primeros Detenidos a «Alligator Alcatraz»
El centro, que ha sido bautizado con el ominoso nombre de «Alligator Alcatraz», comenzó a recibir a sus primeros inmigrantes detenidos el miércoles por la noche. El apodo se hizo oficial cuando los trabajadores reemplazaron las antiguas señales de lo que era un centro de entrenamiento con letreros que ahora leen «Alligator Alcatraz», un nombre que evoca tanto el peligro de la fauna local como la infame prisión de máxima seguridad.
La opacidad en torno a la instalación ha sido una fuente de gran preocupación. Un grupo de legisladores demócratas del estado que intentó realizar una inspección del sitio fue denegado en la entrada, lo que ha aumentado las sospechas sobre las condiciones y el trato a los detenidos en su interior.
Despliegue Militar: 200 Marines en Florida
Añadiendo una nueva dimensión a la situación, el Pentágono confirmó que ha enviado a 200 marines a Florida. Este contingente representa la «primera ola» de una operación diseñada para asistir a la agencia de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) en sus funciones.
El uso de marines, una fuerza de combate de élite, en lugar de la Guardia Nacional u otras unidades, para tareas de apoyo a la ley de inmigración a nivel nacional es una medida muy inusual que ha sido calificada de alarmante por críticos, quienes temen que se estén borrando las líneas entre las funciones militares y las civiles.
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) ha declarado que el estado de Florida, y no el gobierno federal, es el responsable de la gestión de «Alligator Alcatraz». Esta afirmación ha generado una fuerte controversia sobre la jurisdicción y la responsabilidad final de la operación.
La Comunidad Reacciona: Boicot a los «Food Trucks»
La controversia en torno a «Alligator Alcatraz» se ha extendido más allá de los círculos políticos y ha llegado a la comunidad empresarial local de una manera inesperada. Un video que se hizo viral en redes sociales mostraba a varios camiones de comida muy conocidos en Miami, como Kona Ice, ChurroMania y Ms. Cheezious, entrando a las instalaciones para prestar servicio.
La publicación del video provocó una reacción negativa inmediata en línea, con miles de usuarios llamando a un boicot contra estas empresas por colaborar con el centro de detención. Este incidente demuestra cómo la polarización en torno a la política migratoria está afectando a todos los niveles de la sociedad.
Este conjunto de acontecimientos se produce en un clima de creciente tensión en el sur de la Florida, una región con una gran población inmigrante, particularmente de Haití y otros países del Caribe. El Miami Herald publicó recientemente una dura columna de opinión criticando un plan de la administración Trump para poner fin al Estatus de Protección Temporal (TPS) para los haitianos, una medida que afectaría a decenas de miles de residentes.
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