¿Sobornos disfrazados de entretenimiento? Las acusaciones de Trump que sacuden la relación entre política y celebridades en EE.UU.
La maquinaria de la controversia se puso en marcha cuando Donald Trump, utilizando su plataforma Truth Social como megáfono, lanzó dardos envenenados directamente al corazón de la campaña demócrata y sus ilustres simpatizantes. Las acusaciones, vertidas entre el domingo 18 y el lunes 19 de mayo de 2025, no son vagas; Trump señala con dedo acusador fechas y nombres específicos.
En su mira están Bruce Springsteen, cuestionando cuánto se le pagó por su «mala actuación» durante un evento de campaña de Kamala Harris el 28 de octubre de 2024 en Georgia. También apunta a Beyoncé, preguntando por su participación en un acto en Houston, Texas, el 25 de octubre. La lista no termina ahí; Oprah Winfrey, por un evento el 20 de septiembre, y Bono, el icónico líder de U2, también figuran en la diatriba presidencial.
Pagos disfrazados
La alegación central de Trump es dinamita pura: sostiene que estos pagos, disfrazados bajo el concepto de «entretenimiento», fueron en realidad desembolsos por «APOYO» político, una práctica que, de comprobarse, rozaría o cruzaría la línea de la ilegalidad en el financiamiento de campañas. El exmandatario no duda en calificarlo como un «esfuerzo muy costoso y desesperado para aumentar artificialmente su escasa audiencia», añadiendo un enfático «¡NO ES LEGAL!».
«Los candidatos no pueden pagar por APOYO, que es lo que hizo Kamala, con el pretexto de pagar por entretenimiento. ¡NO ES LEGAL!» (Declaración atribuida a Donald Trump ).
Es crucial recordar que esta no es la primera vez que la sombra de la duda planea sobre la financiación de apoyos estelares. Tanto Oprah Winfrey como Tina Knowles, madre de Beyoncé, ya habían salido al paso de acusaciones similares de financiamiento irregular en el pasado.
En noviembre de 2024, Oprah aclaró que un pago de un millón de dólares de la campaña de Harris fue para cubrir los costos de producción de una entrevista organizada durante la campaña, y no una remuneración por asistir a un evento. Por su parte, la madre de Beyoncé negó categóricamente un supuesto pago de diez millones de dólares a la superestrella. Estas negaciones previas añaden una capa de complejidad al asunto, sugiriendo que la verdad podría ser más matizada de lo que las acusaciones de Trump hacen parecer.
¿Cuánto cuesta el «sello de aprobación» de una estrella como Beyoncé o Springsteen?
Desde una perspectiva financiera, la opacidad en torno a los honorarios que las celebridades perciben por sus apariciones y respaldos en campañas políticas es un terreno pantanoso. ¿Cuánto cuesta realmente el «sello de aprobación» de una estrella de la talla de Beyoncé o Springsteen? Si las investigaciones que exige Trump llegaran a materializarse y demostraran irregularidades, las consecuencias podrían ser severas: desde multas considerables hasta un daño reputacional difícil de cuantificar tanto para las estrellas involucradas como para la propia campaña demócrata.
Pero el alcance de estas acusaciones va más allá de la mera legalidad o las cifras en un contrato. La estrategia de Trump parece apuntar a erosionar la credibilidad misma del apoyo que las celebridades brindan a sus oponentes políticos.
Al pintar estas alianzas como meramente transaccionales, busca sembrar la duda en el electorado: ¿es convicción ideológica o un simple negocio? Este movimiento podría tener un efecto disuasorio en futuras colaboraciones entre el mundo del espectáculo y la arena política, o, como mínimo, forzar una mayor transparencia en los acuerdos financieros que las sustentan.
El poder político contra la fama
Lo que Trump está poniendo sobre la mesa es un choque de titanes: el poder político contra el poder de la fama, y en medio, la maquinaria financiera, a menudo oculta, que engrasa estas relaciones.
La «investigación a fondo» que clama Trump, de llevarse a cabo, podría desvelar cifras y pactos que harían palidecer a más de uno, exponiendo las verdaderas apuestas en este juego de poder donde Washington y Hollywood bailan un tango a veces demasiado cercano.
¿Crees que las estrellas realmente cobran por su apoyo político o se trata de una convicción genuina? ¿Deberían investigarse a fondo estos pagos como exige Trump? ¡Queremos tu veredicto bajo la lupa en los comentarios y que compartas esta nota que está que arde! #Trump #KamalaHarris #Beyonce #Springsteen #EscandaloPolitico #MasChisme
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