Blake Lively, la conocida actriz de «Gossip Girl», ha protagonizado un escándalo que ha capturado la atención del mundo del cine y las redes sociales. La actriz, de 37 años, presentó una demanda legal contra Justin Baldoni, su coprotagonista y director de la adaptación cinematográfica de Romper el círculo (It Ends With Us), acusándolo de acoso sexual y difamación. Este conflicto, que ha sacudido la industria, ha revelado tensiones ocultas y prácticas que desafían los límites de la ética en el cine.
¿Qué sucedió en el rodaje de Romper el círculo?
La demanda, que fue presentada en los tribunales de Los Ángeles, señala que Lively sufrió daños emocionales a raíz de las conductas inapropiadas de Baldoni durante la filmación de la película. Según los documentos judiciales obtenidos por PEOPLE, Lively alegó que Baldoni improvisó besos no deseados e hizo comentarios sobre su vida sexual, incluso mencionando experiencias en las que, según él, no recibió consentimiento.
Además de las acusaciones de acoso sexual, la actriz denuncia otros comportamientos invasivos, como la exhibición de un video de la esposa de Baldoni desnuda y la presencia no solicitada de Baldoni y otros miembros del equipo en su camerino, en momentos privados e íntimos. La situación se volvió tan insostenible que, según el reporte de The New York Times, Lively solicitó una reunión con el estudio y otros involucrados para abordar los problemas y establecer límites claros sobre lo que estaba ocurriendo en el set.
Las demandas de Blake Lively durante la reunión
La actriz presentó una serie de demandas para proteger su integridad y dignidad, que fueron aceptadas en la reunión. Entre ellas se incluyó la petición de que no se mostraran más videos de mujeres desnudas, que se evitara discutir temas como la supuesta adicción a la pornografía de Baldoni y que no se añadieran escenas sexuales no acordadas previamente en el guion.
Aunque estas solicitudes fueron inicialmente aceptadas, Lively asegura que Baldoni no cumplió con lo pactado. En lugar de ello, la actriz denuncia que el director inició una campaña de manipulación mediática para destruir su reputación pública, lo que la llevó a tomar acciones legales.
La defensa de Justin Baldoni
Desde el inicio de la controversia, la defensa de Baldoni ha sido tajante. El abogado del director, Bryan Freedman, calificó las acusaciones de Lively como “falsas, escandalosas e intencionalmente sensacionalistas”. En una declaración a The Hollywood Reporter, Freedman sugirió que la demanda era un intento desesperado de Lively para «arreglar» una reputación que, según él, ya había sido dañada por sus propias declaraciones durante la promoción del filme.
Freedman también acusó a Lively de haber generado conflictos en el set y de haber amenazado con no participar en el rodaje o en la promoción de la película. La situación se complicó aún más con la contratación de un gestor de crisis por parte del estudio, a raíz de las «numerosas demandas y amenazas» hechas por Lively.
¿Cómo afectó la controversia a la promoción de la película?
Durante la gira promocional de Romper el círculo, que se estrenó en agosto, las tensiones entre Lively y Baldoni fueron palpables. Ambos evitaron posar juntos en los eventos de estreno, incluida la premiere en Nueva York, lo que no pasó desapercibido para los fans y medios de comunicación. Además, Lively fue criticada por algunos por utilizar la promoción de la película como plataforma para publicitar su línea de cuidado capilar, lo que algunos consideraron inapropiado dado que la trama de la película aborda temas de violencia doméstica.
La posible secuela de Romper el círculo
Este escándalo también ha generado incertidumbre sobre el futuro de la franquicia. Aunque Baldoni y su productora, Wayfarer Studios, poseen los derechos de la secuela de Romper el círculo, titulada It Starts With Us, el conflicto legal entre los coproductores podría dificultar cualquier proyecto futuro. Los fans del libro de Colleen Hoover y de la película, por lo tanto, se encuentran a la espera de ver cómo se resuelve este enfrentamiento.
¿Qué significa este caso para la industria del cine?
El caso de Blake Lively y Justin Baldoni ha puesto en evidencia las difíciles dinámicas laborales que existen en el mundo del cine. Este conflicto no solo refleja las tensiones entre los actores y directores, sino que también pone de relieve los problemas de acoso sexual, manipulación mediática y abuso de poder dentro de la industria. Además, subraya la importancia de establecer y respetar límites claros en los sets de filmación, especialmente en un momento en el que los temas de consentimiento y respeto hacia las mujeres son más relevantes que nunca.
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