El cometa interestelar 3I/ATLAS, procedente de fuera del sistema solar, alcanza hoy su punto más cercano a la Tierra, marcando un evento astronómico excepcional para la comunidad científica. Con un núcleo estimado entre 10 y 30 kilómetros y una velocidad de desplazamiento de 68 kilómetros por segundo, su paso permitirá nuevas observaciones sobre los orígenes del universo.
Un visitante interestelar sin riesgo para la Tierra
Aunque el cometa se aproxima a nuestro planeta, no representa peligro alguno, ya que su máxima cercanía será de unos 270 millones de kilómetros. Alcanzará su perihelio —el punto más próximo al Sol— a unos 210 millones de kilómetros, cerca de la órbita de Marte. En ese momento mostrará su mayor brillo, siendo visible únicamente con telescopios profesionales.
El 3I/ATLAS es el tercer objeto confirmado proveniente del espacio interestelar, descubierto el 1 de julio de 2025 por la red ATLAS en Chile. Su órbita hiperbólica demuestra que no pertenece al sistema solar y que, tras su paso, continuará su viaje hacia el espacio profundo.
Un estudio clave para entender el origen del cosmos
El seguimiento del cometa forma parte de una colaboración internacional liderada por la Agencia Espacial Europea (ESA), la NASA y la Red Internacional de Alerta de Asteroides (IAWN), con participación de observatorios españoles como el Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC).
La campaña de observación se extenderá del 25 de noviembre de 2025 al 27 de enero de 2026, con el fin de analizar su composición química y su posible origen galáctico, que podría situarse en un sistema estelar formado miles de millones de años antes que el Sol.
Estos estudios permitirán comprender mejor cómo se forman los planetas y las estrellas, y ofrecerán información valiosa sobre la diversidad del cosmos y la evolución de los sistemas estelares.
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