Una buena noticia para los usuarios de tarjeta de crédito y débito en México, pues la Cámara de Diputados aprobó esta semana una serie de cambios legales que buscan frenar prácticas abusivas de bancos y comercios, como cargos no autorizados, información poco clara y cancelaciones imposibles.
Se trata de modificaciones a la Ley para la Transparencia y Ordenamiento de los Servicios Financieros, una normativa que regula los servicios bancarios en el país. Con la reforma, los legisladores buscan dar más poder a los usuarios en temas donde por años han sido vulnerables: falta de claridad, comisiones escondidas y cancelaciones complicadas.
¿Por qué esta reforma? Durante años, los clientes con tarjeta de crédito han enfrentado situaciones como:
- Cargos desconocidos en su estado de cuenta.
- Seguros o servicios “incluidos” que nunca autorizaron.
- Proceso de cancelación excesivamente largo, lleno de trabas.
- Información confusa sobre comisiones o intereses.
De acuerdo con datos de la CONDUSEF, más del 40% de las quejas que recibe tienen que ver con tarjetas de crédito o débito. Muchas de ellas están relacionadas con cargos no reconocidos o servicios no solicitados.
La reforma aprobada fue diseñada precisamente para atacar estos puntos. A través de nuevas obligaciones legales, se busca evitar que el usuario quede desprotegido frente a estas prácticas.
Los 5 cambios en la tarjeta de crédito que te impactan directamente
1. Cargos por servicios no autorizados estarán prohibidos
Esto incluye cualquier tipo de comisión, seguro, membresía, programa de puntos o beneficio adicional que no haya sido aceptado explícitamente por el usuario.
Antes, muchos bancos o comercios “empaquetaban” servicios, como seguros de vida, asistencias o membresías, sin que el usuario lo advirtiera. Ahora, esto será ilegal.
“Lo que no esté firmado o aceptado por ti, no puede cobrarse”, establece la reforma.
2. No puede haber cargos sin consentimiento expreso
Si el banco no demuestra que tú aceptaste un servicio, no puede cobrártelo. Y si lo hace, tendrás derecho a reclamar y pedir devolución.
Esto incluye todos los métodos de aceptación: firma física, firma digital, consentimiento verbal grabado o cualquier medio que pueda demostrar tu autorización.
3. Transparencia total en costos y comisiones
Desde el momento en que contratas un producto financiero, el banco está obligado a informarte, sin letras chiquitas, sobre:
- Tasas de interés de tu tarjeta de crédito.
- Comisiones o penalizaciones.
- Beneficios reales y restricciones.
Esta información deberá estar disponible de manera clara tanto en el contrato como en su portal web.
4. Cancelación de tarjetas 24/7, sin costo y en máximo cinco días
Uno de los cambios más importantes: si quieres cancelar una tarjeta de crédito o débito, podrás hacerlo en cualquier momento, por los siguientes canales:
- En sucursal.
- Por teléfono.
- En línea, incluyendo apps y sitios web.
Los bancos deberán habilitar un botón visible en sus plataformas para tramitar la cancelación. No será necesario ir a la sucursal ni entregar la tarjeta físicamente. El proceso no podrá tardar más de cinco días hábiles y deberá entregarse una constancia digital o física.
Además, no podrán aplicarte cargos o penalizaciones por cancelar.
5. Tarjetas enviadas sin solicitud serán nulas
Si un banco o tienda envía una tarjeta de crédito sin que la hayas solicitado, esa tarjeta no tiene validez legal y no será tu responsabilidad cancelarla.
Esto evita que las instituciones intenten activar líneas de crédito sin autorización del cliente.
¿Qué sigue para que estas medidas se apliquen?
El dictamen aprobado en la Cámara de Diputados fue enviado al Senado de la República, donde será discutido y votado. Si se aprueba, los bancos y comercios deberán adaptar sus procesos para cumplir con la ley. De lo contrario, podrían ser multados.
Lo que está claro es que esta reforma representa un paso importante en la protección al usuario financiero en México. Con ello, los bancos deben actuar con transparencia, y los usuarios deben tener el control de sus finanzas sin sorpresas desagradables en su tarjeta de crédito.
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