Ana, dueña de una tienda de abarrotes en Querétaro, llevaba meses preocupada por un adeudo fiscal que acumulaba recargos y multas. Con su negocio golpeado por la pandemia, cada peso contaba. Entonces, escuchó la noticia: el SAT anunció un estímulo fiscal, el cual tiene como objetivo ayudar a los pequeños contribuyentes.
Este programa elimina 100% de multas, recargos y gastos de ejecución para quienes regularicen sus obligaciones fiscales. Ana decidió actuar rápido. En este artículo, te contamos cómo funciona este beneficio y cómo puedes aprovecharlo, al igual que Ana.
¿Quiénes califican para el estímulo fiscal?
El SAT estableció criterios claros para determinar quién puede acceder a este beneficio:
- Ingresos de hasta $35 millones: Dirigido a personas físicas y morales dentro de este rango.
- Sin condonaciones previas: No haber participado en programas similares en 2000, 2007 o 2013.
- Cumplimiento legal: No tener sentencias por delitos fiscales ni estar en los listados definitivos del Código Fiscal de la Federación.
- No en quiebra: Los contribuyentes en concurso mercantil o declarados en quiebra están excluidos.
Casos donde aplica la condonación
Contribuciones omitidas actualizadas
Si tienes adeudos fiscales, puedes regularizarlos generando una línea de captura en el portal del SAT o mediante una cita presencial. El pago debe hacerse en una sola exhibición.
Facultades de comprobación
Los contribuyentes bajo revisión pueden corregir sus omisiones antes de recibir una resolución definitiva.
Créditos fiscales a plazos
Si tienes créditos fiscales autorizados para pago en parcialidades hasta el 1 de enero de 2025, puedes liquidar el monto restante en una sola exhibición para acceder al estímulo.
Créditos fiscales firmes
Incluye créditos determinados que no han sido impugnados o en los que te desistas de medios de defensa. En este caso, el pago puede realizarse hasta en seis parcialidades.
Pasos para aprovechar el estímulo fiscal
- Revisa tus adeudos: Ingresa al portal del SAT para verificar si calificas.
- Solicita el estímulo: Genera una línea de captura o agenda una cita en oficinas.
- Cumple las condiciones: Asegúrate de cumplir con los requisitos legales.
- Realiza el pago: En una sola exhibición o en parcialidades, según el caso.
Beneficios de la condonación fiscal
Este estímulo es más que una oportunidad económica; es un respiro financiero para pequeños negocios como el de Ana. Entre los beneficios destacan:
- Ahorro significativo: Eliminar recargos y multas puede reducir la deuda total considerablemente.
- Evitar procesos legales: Al regularizar tu situación, evitas problemas legales y administrativos.
- No afecta ISR: El beneficio no se considera ingreso acumulable para el Impuesto sobre la Renta.
Actuar a tiempo es clave
Ana no dudó en acudir al SAT, revisar su situación y regularizarse. Gracias al estímulo, ahora puede reinvertir en su negocio sin preocuparse por adeudos fiscales. Si estás en una situación similar, esta es tu oportunidad para comenzar 2025 con finanzas más sanas.
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