En una acción coordinada reportada alrededor del 29 de abril, la Oficina del Contralor de la Moneda (OCC), la Corporación Federal de Seguro de Depósitos (FDIC) y la Junta de la Reserva Federal (FRB) han modificado su postura regulatoria sobre las criptomonedas para las entidades bancarias bajo su supervisión.
Específicamente, la OCC rescindió la Carta Interpretativa 1183 (revirtiendo la 1179), la FDIC rescindió la guía FIL-16-2022, y la FRB rescindió las directivas SR 22-6 y SR 23-8.
Estas acciones eliminan la necesidad de que los bancos obtengan una «no objeción» o notifiquen previamente a los reguladores antes de participar en actividades consideradas permisibles con criptoactivos, como la custodia o servicios relacionados con stablecoins, siempre que se gestionen adecuadamente los riesgosasociados.
Este cambio representa un giro significativo desde una postura previa más restrictiva hacia un enfoque basado en principios, donde la responsabilidad de operar de manera segura y sólida recae en las instituciones, dentro del marco legal existente.
La medida podría facilitar una mayor adopción institucional de los criptoactivos al eliminar barreras procesales significativas. Además, las agencias retiraron dos declaraciones interinstitucionales previas sobre los riesgos de los criptoactivos, sugiriendo una posible reevaluación de dichos riesgos o el desarrollo de nueva orientación.
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