A partir del 11 de noviembre, México comenzó a aplicar nuevos aranceles de hasta 210.44% a las importaciones de azúcar, según lo publicado en el Diario Oficial de la Federación (DOF).
La medida, impulsada por la Secretaría de Economía, busca proteger a la agroindustria nacional frente a la sobreoferta interna y la caída de los precios internacionales del endulzante.
¿Por qué suben los aranceles al azúcar?
El gobierno explicó que el arancel previo, basado en la modalidad de “Nación Más Favorecida”, ya no era suficiente para sostener a los productores ante la caída del precio global del azúcar.
De acuerdo con datos oficiales, el azúcar cruda internacional cuesta alrededor de 410 dólares por tonelada, mientras que en México el precio doméstico ronda los 901 dólares. Antes del decreto, el arancel era de 360 dólares, lo que colocaba el precio de importación en 770 dólares, por debajo del precio nacional.
Con los nuevos aranceles, el azúcar cruda importada costará más de 1,050 dólares por tonelada, y la refinada, unos 1,310 dólares, es decir, por encima del promedio local.
¿Qué productos pagarán más impuestos?
Las nuevas cuotas establecidas por la Secretaría de Economía varían según el tipo de azúcar. Los productos más gravados serán el azúcar líquida refinada y el azúcar invertido, que enfrentarán un arancel de 210.44%.
El resto de las presentaciones, como azúcar de caña y remolacha, azúcares aromatizados o con colorante, chocolates con alto contenido de azúcar y jarabes aromatizados, tendrán un gravamen del 156%.
Listado de productos sujetos al nuevo arancel:
- Azúcar de remolacha (1701.12.05)
- Azúcar de caña según la Nota 2 (1701.13.01)
- Otros azúcares de caña (1701.14.91)
- Azúcar con aromatizantes o colorantes (1701.91.04)
- Otras formas no especificadas (1701.99.99)
- Chocolate con alto contenido de azúcar (1806.10.01)
- Jarabes aromatizados o con colorantes (2106.90.05) → 156%
- Azúcar líquida refinada e invertida (1702.90.01) → 210.44%
El decreto también aclara que estas fracciones están exentas del impuesto a la exportación, por lo que la medida solo impactará en las importaciones.
¿Cómo afectará al consumidor?
Expertos del sector advierten que el incremento en los costos de importación podría trasladarse a los precios al consumidor final, especialmente en bebidas, panadería, confitería y alimentos procesados que dependen del azúcar refinada.
“Estas medidas buscan equilibrar el mercado interno, pero también podrían generar aumentos en productos que forman parte del consumo básico”, advirtieron representantes de la Cámara Nacional de las Industrias Azucarera y Alcoholera.
La industria azucarera mexicana genera alrededor de 440 mil empleos directos y beneficia de forma indirecta a más de 2.2 millones de personas, entre productores, cortadores, transportistas y comerciantes.
El decreto llega además en un contexto de contrabando e importaciones irregulares, que han afectado la competitividad del mercado interno. Las autoridades sostienen que este ajuste restablecerá condiciones de competencia y garantizará un ingreso más justo para los productores, quienes actualmente solo reciben el 57% del valor final de la venta del azúcar.
