En medio de la incertidumbre generada por los cambios en la política arancelaria de Estados Unidos, la automotriz japonesa Mazda ha confirmado que mantendrá sus operaciones en México, reafirmando su confianza en la estabilidad económica del país y en el liderazgo de la presidenta Claudia Sheinbaum.
Durante una reunión celebrada en Palacio Nacional, Sheinbaum sostuvo un encuentro con Moro, alto ejecutivo del corporativo japonés, donde se abordaron temas clave sobre el futuro de la marca en México, la producción de vehículos eléctricos e híbridos y los avances en las negociaciones del Tratado Comercial de América del Norte (T-MEC).
Mazda apuesta por México pese a la incertidumbre comercial
Mientras otras empresas han mostrado cautela ante los recientes ajustes arancelarios impulsados por Washington, Mazda decidió reafirmar su compromiso con el país. Su planta, ubicada en Salamanca, Guanajuato, seguirá siendo uno de los pilares de su producción en el continente.
Sheinbaum destacó que esta decisión es “una muestra de confianza en el potencial industrial de México y en su capacidad para liderar la transición hacia una movilidad más limpia y eficiente”.
La mandataria agregó que el gobierno trabaja para proteger las cadenas de suministro y garantizar que el T-MEC continúe fortaleciendo la competitividad de las empresas instaladas en el país.
Hacia un futuro híbrido: la visión sustentable de Mazda
Uno de los puntos más relevantes del encuentro fue la transición hacia tecnologías sustentables. Mazda y el gobierno mexicano coincidieron en que, aunque los vehículos eléctricos representan el futuro, los autos híbridos ofrecen una alternativa inmediata más funcional para el mercado nacional, al no depender completamente de infraestructura de carga eléctrica.
“Queremos avanzar hacia una movilidad sustentable, pero con realismo. Por ahora, los híbridos son una opción viable y accesible”, habría comentado Sheinbaum durante la reunión.
Mazda, por su parte, planea incrementar la producción de autos híbridos en su planta mexicana, impulsando el empleo local y fortaleciendo su posicionamiento como marca responsable con el medio ambiente.
México, un centro estratégico para la industria automotriz
El respaldo de Mazda llega en un momento crucial para el sector automotriz. México sigue siendo el séptimo productor de vehículos a nivel mundial y un eslabón clave en la exportación hacia Estados Unidos y Canadá.
La permanencia de la marca japonesa refuerza el papel del país como hub de manufactura automotriz, especialmente en el desarrollo de modelos con tecnología híbrida.
Además, la administración federal busca que las empresas que operan en México inviertan más en innovación energética y formación laboral, asegurando que el crecimiento económico vaya de la mano con la sostenibilidad.
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