Litigar en México se ha convertido en el eje de la más reciente batalla legal entre Tv Azteca —empresa clave de Grupo Salinas— y sus acreedores en Estados Unidos. Lo que comenzó como un conflicto financiero por una emisión de bonos en 2017 hoy es una guerra jurídica binacional que expone no solo las tensiones entre jurisdicciones, sino también la estrategia de supervivencia de una televisora que arrastra un adeudo que ya asciende a 600 millones de dólares.
La historia no se cuenta únicamente en los tribunales. Se cuenta en reuniones nocturnas, correos entre despachos, decisiones que cambian a última hora y comunicados que parecen buscar tiempo, aire o ventaja. Porque en esta disputa, cada día importa.
El origen del conflicto: una deuda que creció con la pandemia
Todo comenzó en 2017, cuando Tv Azteca emitió bonos por 400 millones de dólares con The Bank of New York Mellon como fiduciario. Durante años pareció un acuerdo estable, hasta que la pandemia de coronavirus golpeó el negocio de la empresa.
En 2020, Tv Azteca dejó de pagar. Argumentó que las afectaciones económicas del confinamiento habían creado un escenario insostenible. Desde entonces, la deuda creció hasta los 600 millones de dólares y los tenedores de bonos iniciaron su propia ofensiva legal.
Nueva York ordena frenar, pero en México los papeles siguen en movimiento
El punto crítico llegó el 22 de septiembre de 2025. El juez Paul G. Gardephe, de la Corte del Distrito Sur de Nueva York, ordenó detener todo procedimiento en México relacionado con la deuda. La instrucción era clara: no más acciones legales en tribunales mexicanos.
Pero según la defensa de los bonistas, Tv Azteca no cumplió del todo.
Los documentos judiciales afirman que la empresa y sus filiales siguen litigando activamente en el juzgado noveno civil y en el trigésimo octavo, pese a la orden estadounidense. La televisora sostiene algo distinto: asegura que no litiga activamente, pero reconoce que no ha abandonado los procedimientos porque quiere hacerlo “sin perjuicio”, para no renunciar a su derecho a reabrir el caso en el futuro.
Ahí está el corazón del conflicto: Tv Azteca quiere cerrar el caso, pero no perder la posibilidad de abrir otro; los acreedores quieren que cierre sin condiciones.
Litigar en México: medidas cautelares, recursos y revocaciones
A inicios de noviembre, el décimo tribunal colegiado revocó una medida cautelar que protegía a la televisora de cumplir sus obligaciones contractuales con los bonistas. Pero esa era solo una pieza de un rompecabezas más grande.
En paralelo, Tv Azteca enfrenta otra medida cautelar en el noveno juzgado civil: una que la exime de entregar información financiera periódica a la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), a pesar de cotizar en bolsa.
La CNBV peleó contra esa resolución durante dos años. Finalmente, el 30 de octubre de 2025, un juez le dio la razón.
Sin embargo, Tv Azteca respondió con un recurso de impugnación presentado el 12 de noviembre, buscando frenar la orden que la obligaría a transparentar su situación financiera. Esto significa que, mientras la orden de Nueva York exige un alto total, en México el tablero legal sigue moviéndose.
La mitad del conflicto: insistencia en litigar en México como estrategia
A la mitad de esta historia jurídica, el concepto de litigar en México ya no es solo un término legal. Es la columna vertebral de la estrategia de Grupo Salinas. Continuar los procesos —aunque sea de manera limitada o estratégica— mantiene margen de maniobra, crea presión, compra tiempo y evita que el escenario se defina únicamente en Nueva York.
Los acreedores lo interpretan de otra forma: para ellos, Tv Azteca está desafiando una orden judicial extranjera que debería ser vinculante.
Y ambos lados saben que el tiempo es poder.
Un cierre sin cierre: la incertidumbre como escenario principal
Lo más relevante es que hasta ahora no existe una resolución definitiva ni en México ni en Estados Unidos. Cada fallo abre la puerta a otro recurso, y cada recurso abre la puerta a una nueva lectura del conflicto.
La última comunicación oficial de Tv Azteca a inversionistas —del 14 de noviembre de 2023— hablaba de una mediación completada. Dos años después, esa mediación parece no haber resuelto nada: los bonistas siguen persiguiendo el pago, los tribunales siguen recibiendo documentos y la disputa permanece abierta.
En este punto, la única certeza es que Grupo Salinas seguirá intentando litigar en México hasta que no exista una orden absolutamente inapelable que lo impida o hasta que encuentre una salida negociada.
Porque, al final, para Tv Azteca, este conflicto no solo se trata de una deuda: se trata de control, de narrativa, de territorio legal y de tiempo. Y por ahora, su estrategia sigue dependiendo de una misma frase, repetida desde el inicio hasta el desenlace: litigar en México.
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