Uvas para Año Nuevo son uno de los productos más buscados en México durante diciembre, no solo por su sabor, sino por la tradición de comer 12 uvas en las campanadas para pedir deseos al iniciar el nuevo ciclo. Con el cierre de 2025, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) presentó un monitoreo actualizado de precios, variedades y beneficios de este fruto, revelando diferencias importantes entre regiones del país.
Uvas para Año Nuevo pueden encontrarse a precios muy distintos dependiendo de la ciudad, el tipo de uva y el establecimiento, por lo que comparar antes de comprar puede marcar una diferencia significativa en el gasto familiar.
Una tradición con historia y significado
La costumbre de consumir uvas en Año Nuevo tiene un profundo arraigo cultural en México. Cada una de las 12 uvas simboliza un deseo para los meses venideros, convirtiéndose en un ritual que une a familias enteras. Más allá de la tradición, este fruto forma parte de la gastronomía nacional desde la época colonial, cuando los misioneros españoles impulsaron la viticultura en el territorio.
Hoy, las uvas no solo se consumen frescas, sino que también son clave en la producción de vinos, jugos, conservas, pasas y aceites extraídos de sus semillas, incluso utilizados en la industria cosmética.
Producción de uva en México
México registró una producción de 499,140 toneladas de uva en 2024, de las cuales cerca del 80% correspondió a uva fruta, destinada al consumo directo. Los principales estados productores son Sonora, Zacatecas y Jalisco, mientras que nueve de cada diez toneladas exportadas tienen como destino Estados Unidos.
Profeco clasifica la uva en tres grandes grupos:
- Uva fruta, más carnosa y jugosa, ideal para consumo fresco.
- Uva pasa, obtenida mediante deshidratación.
- Uva industrial, con mayor acidez, utilizada para vinos y jugos.
Beneficios nutricionales de las uvas
Además de su simbolismo, las uvas para Año Nuevo aportan importantes beneficios para la salud. Son ricas en antioxidantes, que ayudan a combatir el envejecimiento celular, y contienen fibra, fundamental para una buena digestión.
También aportan taninos y ácido cafeico, con propiedades bactericidas, así como minerales esenciales como potasio, magnesio y calcio, que favorecen la función muscular y cardiaca. A esto se suman el ácido fólico y la vitamina B6, claves para el correcto funcionamiento del cerebro y la formación de glóbulos rojos y blancos.
Precios de uvas en México: grandes diferencias por región
El monitoreo de Profeco, realizado entre el 15 y 19 de diciembre, detectó variaciones de hasta 120 pesos por kilo entre ciudades y mercados, una diferencia considerable para las compras de fin de año.
La uva globo o red globo fue la más económica entre las variedades analizadas, con un precio promedio de 89.57 pesos por kilo. El costo más bajo se registró en Saltillo, Coahuila, con 36.90 pesos, mientras que el más alto alcanzó 122.13 pesos en Coyoacán, Ciudad de México.
Por su parte, la uva Thompson o blanca sin semilla fue la más cara, con un promedio nacional de 102.17 pesos por kilo. El precio mínimo se encontró en La Paz, Baja California, con 59.90 pesos, pero en ciudades como Guadalajara, Mérida, Oaxaca, Tuxtla Gutiérrez y Veracruz, llegó hasta 160 pesos.
En tanto, la uva roja sin semilla se vendió en promedio en 90.67 pesos por kilo. Las opciones más accesibles se localizaron en Cancún y Morelia, alrededor de 49.90 pesos, mientras que los precios más altos oscilaron entre 147 y 149 pesos en León, Guanajuato, y algunas tiendas de Cancún.
Consejos para comprar uvas y ahorrar
Para elegir las mejores uvas para Año Nuevo, Profeco recomienda revisar que estén firmes, sin manchas ni moho, y con el racimo bien sujeto al tallo. También es clave comparar precios entre mercados, centrales de abasto y supermercados.
La dependencia recordó que los precios por ciudad y establecimiento pueden consultarse en el portal Quién es Quién en los Precios, una herramienta útil para tomar decisiones informadas antes de las compras decembrinas.
Las uvas para Año Nuevo son mucho más que un símbolo de buenos deseos: representan una tradición, un alimento nutritivo y un gasto que puede optimizarse con información. Comparar precios, conocer las variedades y elegir con anticipación permite mantener viva la costumbre sin afectar de más el bolsillo, iniciando el año con mejores decisiones y, por supuesto, con buenos deseos.
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