Estalló la bomba. Juan Carlos Osorio, ex técnico de la Selección Mexicana, rompió el silencio y acusó a la directiva de Chivas de inventar una excusa «muy ridícula» y «grosera» para sabotear su fichaje: que olía a alcohol durante una reunión.
El mundo del fútbol mexicano se ha visto sacudido por las explosivas declaraciones del entrenador colombiano Juan Carlos Osorio. En una reveladora entrevista con el periodista David Faitelson, Osorio destapó la presunta «guerra sucia» que impidió su llegada al banquillo del Club Deportivo Guadalajara, uno de los equipos más grandes del país.
La Acusación: Una Excusa «Irrespetuosa y Grosera»
Según el relato de Osorio, después de una serie de reuniones y una presentación que él mismo califica como «muy completa», donde se analizaron todos los aspectos del proyecto deportivo, la negociación se truncó de manera abrupta y con un pretexto inverosímil. El técnico colombiano afirma que la directiva de Chivas le comunicó a sus representantes que no procederían con su contratación porque, supuestamente, él «olía a alcohol» durante uno de los encuentros.
Osorio calificó esta justificación como «muy ridícula», «muy poco profesional», «grosera e irrespetuosa». El estratega, visiblemente molesto, defendió su profesionalismo, asegurando que sería impensable presentarse a una reunión de tal magnitud en esas condiciones, especialmente tratándose de un proyecto que anhelaba profundamente.
«Me pareció muy la verdad, irrespetuoso de parte de ellos, porque si de ser así, me lo debieron haber dicho en ese momento. […] Había otras maneras de poder cortar las negociaciones».
El Contexto: Salida de Xolos y un «Karma»
Estas declaraciones surgen en un momento clave para Osorio, quien recientemente también salió del club Xolos de Tijuana y ha tenido que enfrentar rumores sobre su conducta profesional. En la misma entrevista, Osorio abordó estas acusaciones, negando categóricamente cualquier problema con el alcohol o las adicciones, y afirmando que su primera copa de vino la tomó a los 41 años.
El técnico incluso habló de un «karma» que parece perseguirlo desde que tomó la decisión de no continuar con la Selección Mexicana después del Mundial de 2018, una oportunidad histórica que él mismo dejó pasar. Su fallida llegada a Chivas, un club que por su política de jugar solo con mexicanos se alinea con la creencia de Osorio en el talento nacional, parece ser un nuevo capítulo en esa saga.
El Veredicto del Juez: Una Cortina de Humo que Mancha a Chivas
Analizando los hechos, la versión de Osorio, cargada de detalles y una indignación palpable, resulta más creíble que la supuesta excusa de la directiva de Chivas. Es difícil imaginar a un entrenador de su calibre y experiencia cometiendo un error tan burdo. La acusación del «olor a alcohol» suena más a una cortina de humo, una salida fácil y poco elegante para desechar a un candidato con el que, por cualquier otra razón (quizás desacuerdos en el proyecto, económicos o de poder), ya no querían continuar.
El veredicto de Sport Judge es que, independientemente de si Osorio era el técnico ideal para Chivas o no, la forma en que se manejó su posible fichaje es, como él mismo la calificó, irrespetuosa y poco profesional. Si la acusación es cierta, mancha la imagen de una institución de la talla del Guadalajara. En el fútbol, como en la vida, las formas importan. Y en esta ocasión, la directiva de Chivas parece haber elegido la peor de todas, generando una controversia que daña su credibilidad y le da a Osorio una plataforma para presentarse como una víctima de juego sucio.
TE PODRÍA INTERESAR