Incremento de seguridad tras hechos recientes
CU, las autoridades universitarias informaron que se reforzará la vigilancia y el operativo de protección civil en torno al Estadio Olímpico Universitario, previo al partido de cuartos de final entre Cruz Azul y Chivas, programado para el domingo 30 de noviembre. La medida responde a la necesidad de prevenir incidentes y garantizar un entorno seguro para los aficionados, especialmente después del asesinato de Rodrigo Mondragón, seguidor de Cruz Azul, el pasado 25 de octubre al salir del mismo recinto.

Este caso, que conmocionó al futbol mexicano, continúa su proceso legal. Actualmente, trabajadores de vigilancia de la UNAM se encuentran sujetos a proceso penal por homicidio calificado, lo que aumentó la presión social para mejorar los protocolos de seguridad. La situación ha llevado a la máxima casa de estudios a revisar sus procedimientos internos y reforzar la coordinación con autoridades externas.
Operativo “Estadio Seguro”: nueva estrategia preventiva
A través de una nota informativa, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) anunció que implementará un plan más estricto como parte del operativo “Estadio Seguro”. Su objetivo es fortalecer la colaboración con la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) y garantizar que tanto el interior como el exterior del estadio cuenten con un despliegue reforzado.
Según el comunicado, “la Universidad Nacional robustecerá el despliegue y la operación de elementos de vigilancia y protección civil antes, durante y después del encuentro deportivo”. Esto incluye la presencia de más elementos de seguridad, mayor coordinación entre áreas operativas y un control más riguroso de aficiones rivales, quienes suelen generar tensiones en los accesos y zonas de tránsito.
Fuentes cercanas al operativo señalan que se instalarán anillos de seguridad alrededor del estadio, con puntos estratégicos de revisión y personal capacitado para la detección de riesgos. Además, se colocarán rutas de evacuación adicionales y se reforzará la comunicación interna para responder de manera más rápida ante cualquier incidente.
Control más estricto del consumo de alcohol
Una de las novedades más relevantes del anuncio es la restricción en la venta de bebidas alcohólicas. La UNAM informó que “la venta de bebidas alcohólicas se interrumpirá al inicio del segundo tiempo”, una medida diseñada para reducir comportamientos violentos o altercados relacionados con la ingesta excesiva de alcohol, frecuentes en partidos de alta rivalidad como Cruz Azul vs. Chivas.
Asimismo, se intensificará la revisión de vehículos en los accesos al estadio. Las autoridades señalaron que la inspección tendrá como objetivo “detectar y evitar el acceso de cervezas y otros productos prohibidos”. Este tipo de revisiones se han convertido en un componente esencial en eventos deportivos de gran convocatoria, ya que impiden el ingreso de bebidas no autorizadas o artículos que puedan comprometer la seguridad del evento.
Nuevas disposiciones para la salida del recinto
Con el fin de evitar la permanencia prolongada de grupos fuera del estadio después del encuentro, se realizarán barridos de seguridad para retirar a personas intoxicadas o generarían aglomeraciones innecesarias. La UNAM notificó también que “los estacionamientos cerrarán una hora después de concluido el encuentro”, una medida que busca evitar reuniones o conflictos posteriores al partido.
La administración universitaria recordó que estos lineamientos se aplicarán de manera estricta y en colaboración con fuerzas de seguridad locales. En caso de ser necesario, se podrían implementar cierres preventivos o modificaciones en las rutas de movilidad dentro de Ciudad Universitaria.
Un partido de alto riesgo que requiere vigilancia reforzada
El encuentro entre Cruz Azul y Chivas no solo es uno de los más atractivos de la liguilla, sino también uno considerado de alto riesgo por la intensidad de las aficiones y el antecedente reciente de violencia. La UNAM y las autoridades locales buscan prevenir nuevamente un episodio que manche el espíritu deportivo, por lo que han apostado por un operativo amplio, coordinado y con revisiones más estrictas.
Expertos en seguridad deportiva señalan que este tipo de medidas son necesarias en escenarios donde han ocurrido incidentes graves, ya que la percepción de riesgo suele elevar la tensión entre los asistentes. Por ello, la vigilancia reforzada puede ayudar a crear un ambiente más controlado, disminuir conductas agresivas y garantizar una experiencia más segura para los miles de aficionados que acudirán al estadio.

CU: Un compromiso renovado por la seguridad universitaria y deportiva
Con este operativo ampliado, la UNAM busca enviar un mensaje claro: la seguridad es prioritaria. El refuerzo en las medidas no solo responde a un evento deportivo específico, sino que marca un precedente para futuros encuentros en uno de los estadios más emblemáticos de México. La intención es prevenir tragedias, mejorar la convivencia entre aficiones y demostrar una coordinación más sólida entre autoridades universitarias y de seguridad pública.


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