Un nuevo encuentro marcado por más de una década de exigencias

Sheinbaum sostendrá este miércoles el sexto encuentro con las madres y los padres de los 43 normalistas desaparecidos de Ayotzinapa, en un momento emblemático para el movimiento que lleva más de 11 años demandando verdad, justicia y la presentación con vida de los jóvenes. La reunión se realizará a las 11 de la mañana en Palacio Nacional, un día después de la tradicional marcha del día 26, en la que familiares y colectivos toman las calles para recordar que el caso sigue abierto y que su lucha no ha terminado.

El encuentro ocurre apenas unas horas después de la jornada por la justicia para Ayotzinapa, realizada este martes, donde cientos de personas se sumaron a la movilización desde el Ángel de la Independencia, como cada mes, para exigir avances reales en las investigaciones y sanción a los responsables. Este clima de movilización social da un peso especial a la mesa de diálogo con la mandataria federal.

Un caso que marcó al país y que sigue sin resolverse

Han pasado más de 134 meses desde la noche del 26 y madrugada del 27 de septiembre de 2014, cuando los estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa fueron atacados, detenidos y desaparecidos en Iguala y otros municipios de Guerrero. En los hechos participaron policías municipales, así como elementos de otras corporaciones, incluyendo integrantes de fuerzas federales, según han señalado diversas investigaciones.

Desde entonces, el caso se convirtió en uno de los episodios más dolorosos, complejos y emblemáticos relativos a violaciones graves a los derechos humanos en México. La demanda de justicia ha trascendido gobiernos, comisiones y fiscalías, mientras las familias mantienen una lucha constante que ha visibilizado la importancia de la memoria, la verdad histórica contrastada y la reparación integral del daño.

En este contexto, cada reunión con el Ejecutivo se convierte en un paso clave para actualizar información, solicitar avances y mantener un canal de comunicación directo. La última vez que Sheinbaum se reunió con los familiares fue el 4 de septiembre, antes del onceavo aniversario de la llamada Noche de Iguala, una fecha que se mantiene como símbolo de dolor, indignación y resistencia.

Expectativas para la sexta reunión

Las familias de los normalistas esperan que en este nuevo encuentro se presenten actualizaciones concretas sobre la investigación, acceso a archivos, avances periciales, cooperación interinstitucional y mecanismos de búsqueda. La insistencia sigue siendo la misma desde hace más de una década: que se conozca la verdad y haya justicia para los jóvenes y sus familias.

Además, se prevé que las madres y padres planteen nuevamente la exigencia de esclarecer la participación de diversas corporaciones y de acceder a documentación pendiente en manos del Ejército y otras instituciones federales. Las expectativas aumentan considerando el compromiso público de la nueva administración para trabajar de manera cercana con las víctimas y sus representantes.

La reunión también llega en un momento en el que organismos defensores de derechos humanos han insistido en que el caso no puede cerrarse y que el Estado mexicano debe garantizar el seguimiento permanente. La presencia de las familias en Palacio Nacional refuerza la idea de que la búsqueda continúa y de que el diálogo político debe traducirse en acciones verificables.

La lucha incansable de las familias

Durante estos once años, las madres y padres de los 43 han sostenido una resistencia histórica, acompañada por organizaciones civiles, expertos internacionales y colectivos de víctimas. En cada marcha, conferencia y reunión, mantienen viva la exigencia de presentación con vida, una reparación integral y el fin de la impunidad.

Las familias también han señalado que este caso no solo representa su dolor personal, sino que se ha convertido en un símbolo de los miles de desaparecidos en México. De ahí que las respuestas institucionales sean fundamentales no solo para quienes integran el caso Ayotzinapa, sino para todo el país.

El encuentro con Sheinbaum simboliza, una vez más, un espacio necesario para escuchar y atender las demandas de quienes han padecido años de incertidumbre. Para las familias, este tipo de reuniones son una oportunidad para insistir en que no aceptarán verdades incompletas, ni investigaciones fragmentadas, ni omisiones.

Una cita con Sheinbaum que podría marcar nuevos compromisos

Aunque las expectativas son altas, el contenido real de los acuerdos se conocerá después de la reunión. Lo que sí está claro es que este diálogo se realizará con un fuerte respaldo social, con la memoria colectiva en el centro y con la exigencia de mantener el caso como una prioridad de Estado.

Las familias confían en que esta sexta reunión permita establecer compromisos más firmes, mantenga abiertas las líneas de investigación y avance en la búsqueda de justicia. La cita en Palacio Nacional se convierte así en un recordatorio de que la presión social, la voluntad política y el acompañamiento institucional deben converger para que el caso Ayotzinapa no quede en el olvido.