El Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación (PPEF) 2026 contempla una inversión histórica de 104 mil 576 millones de pesos en infraestructura ferroviaria. El objetivo es construir más de 3 mil kilómetros de nuevas líneas de trenes de pasajeros antes de que termine el sexenio, además de fortalecer la conectividad para carga.
Con estos recursos, se dará continuidad a rutas estratégicas como:
- Buenavista–Pachuca
- México–Querétaro
- Querétaro–San Luis Potosí
- Querétaro–Irapuato
- Irapuato–Guadalajara
- Saltillo–Nuevo Laredo
- San Luis Potosí–Saltillo
El presupuesto también incluye obras clave como el Tren Interurbano México–Toluca y la ampliación del Tren Suburbano hacia el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA). La apuesta del gobierno es consolidar un sistema ferroviario nacional que reduzca costos y tiempos de traslado, tanto para pasajeros como para mercancías.
Tren Maya recibe menos recursos para 2026
Aunque el desarrollo ferroviario mantiene prioridad, el Tren Maya sufrirá un recorte presupuestal del 33%. Para 2026 se destinarán 30 mil millones de pesos, una cifra menor a los casi 40 mil millones ejercidos el año previo.
El proyecto de carga en el sureste es considerado esencial para el impulso económico regional, pese a las críticas por los daños ambientales que ha generado su construcción. En paralelo, la continuación del Tren del Istmo de Tehuantepec recibirá 25 mil millones de pesos, consolidándose como otro eje estratégico.
De acuerdo con el PPEF, “en 2026 se continuará la ejecución de dos proyectos prioritarios que marcan el futuro del sur-sureste de México: el Tren Maya de carga y el Tren del Istmo”.
Con ello, el gobierno federal refuerza su apuesta por los trenes como motor de desarrollo y como una alternativa de transporte sostenible y competitivo que conecte desde el centro del país hasta la frontera norte.
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