La confirmación del primer caso de influenza AH3N2, conocida como “Súpergripe”, en México encendió las alertas sanitarias y abrió el debate sobre su posible llegada a la península de Yucatán.
Aunque el paciente diagnosticado se recuperó sin complicaciones, el infectólogo Alejandro Muñiz advierte que factores como la alta movilidad de personas, especialmente en destinos turísticos como Quintana Roo, y las bajas temperaturas propias del invierno, podrían favorecer la introducción y circulación de esta variante en la región.
El especialista destacó que, si bien no se trata de un virus desconocido, la prevención sigue siendo importante para evitar contagios y cuadros graves de la infección. Mencionó que el principal factor que podría facilitar la llegada de la AH3N2 a la península es el constante movimiento de personas.
“La península de Yucatán, y en particular Quintana Roo, tiene una movilidad muy alta. Todos los días llegan miles de personas de distintas partes del país y del mundo, y eso hace prácticamente inevitable que el virus termine llegando”, explicó.
El clima invernal juega un papel importante para la influenza
El especialista comparó este fenómeno con lo ocurrido en temporadas pasadas en dónde la incidencia de contagio del virus aumentó en la temporada invernal. Sin embargo, reconoció que la letalidad sigue siendo baja.
“Es como cuando alguien llega resfriado a una casa, no significa que todos se vayan a enfermar, pero el virus ya está ahí y encuentra oportunidades para transmitirse. Pero por ahora, la presencia de un caso en el país no implica una emergencia inmediata, pero sí una vigilancia constante”, dijo.
Muñiz explicó que el clima frío propio de esta temporada puede convertirse en un aliado del virus, para que tome más fuerza a inicio de año.
“Las bajas temperaturas afectan las vías respiratorias y hacen que el sistema inmunológico sea un poco más vulnerable, sobre todo en personas con defensas bajas”, indicó.
Detalló que durante el invierno las personas tienden a permanecer más tiempo en espacios cerrados y poco ventilados, lo que incrementa el riesgo de contagio.
“No es solo el virus, es el contexto: frío, reuniones, espacios cerrados y menos ventilación. Todo eso suma”, comentó.

¿Qué tan diferente es la ‘Súpergripe’?
El infectólogo aclaró que, pese a que la variante AH3N2 ha sido llamada “Súpergripe”, su comportamiento clínico no difiere de manera significativa de la influenza estacional.
“Clínicamente se comporta muy parecido a la influenza que ya conocemos. El tratamiento sigue siendo el mismo, con antivirales, y cuando se atiende a tiempo, la evolución suele ser favorable”, explicó.
El especialista destacó que las estrategias de prevención se mantienen sin cambios y que la vacunación sigue siendo una herramienta clave.
“La vacuna que se está aplicando esta temporada sí protege contra las variantes que están circulando, incluida esta. No evita todos los contagios, pero reduce de manera importante las complicaciones graves y las hospitalizaciones.
“La influenza, en cualquiera de sus variantes, nos recuerda cada año que no hay que bajar la guardia. La prevención sigue siendo nuestra mejor herramienta”.
Factores que favorecen su circulación en invierno
- Descenso de temperaturas
- Mayor vulnerabilidad de las vías respiratorias
- Permanencia prolongada en espacios cerrados
- Menor ventilación en hogares y lugares de trabajo
- Reuniones sociales más frecuentes
Síntomas de la influenza AH3N2
- Fiebre alta y repentina
- Tos seca y persistente
- Dolor de garganta
- Escurrimiento o congestión nasal
- Dolor muscular y articular
- Dolor de cabeza
- Cansancio intenso o debilidad
- Escalofríos
- Náuseas
- Diarrea
Recomendaciones
- Aplicarse la vacuna contra la influenza estacional
- Lavarse las manos con frecuencia, especialmente tras usar transporte público
- Usar gel antibacterial cuando no haya agua y jabón
- Utilizar cubrebocas en espacios cerrados o muy concurridos
- Ventilar casas, oficinas y salones
- Evitar tocarse la cara sin lavarse las manos