El 18 de febrero, la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) reveló uno de los golpes más grandes contra el narcotráfico en México. Durante un operativo en Sinaloa, las autoridades federales incautaron 4,700 litros de metanfetamina líquida y otros 269 kilogramos de la misma sustancia. Este aseguramiento, llevado a cabo en tres inmuebles de Culiacán, fue calificado como el mayor durante la administración de Claudia Sheinbaum.
Las fuerzas de seguridad realizaron una serie de cateos en el poblado de Ayuba, en la capital de Sinaloa, donde se presume que se fabricaba y distribuía la metanfetamina. Este decomiso representa un fuerte golpe económico al crimen organizado, estimado en más de 1,462 millones de pesos.
Impacto en los grupos criminales: más de mil millones de pesos asegurados
Con esta incautación, se evitó que 4,969 toneladas de metanfetamina llegaran al mercado, lo que equivaldría a 4.969 millones de dosis. Este gran aseguramiento no solo afectó la cadena de distribución de la droga, sino que también debilitó financieramente a los carteles involucrados en su fabricación y tráfico.
Operativo conjunto: Ejército, Guardia Nacional y más fuerzas de seguridad
El operativo fue realizado por personal del Ejército Mexicano, la Guardia Nacional, la Secretaría de Marina (Semar), la Fiscalía General de la República (FGR) y la SSPC, junto con las autoridades locales de Sinaloa. A pesar del tamaño de la operación, no se reportaron detenciones durante los cateos, aunque los inmuebles fueron asegurados con sellos oficiales y la droga incautada fue puesta a disposición del Ministerio Público.
Inmuebles resguardados y un golpe directo a las finanzas del narco
Las fuerzas de seguridad revisaron a fondo los tres inmuebles en Culiacán donde se encontraron las sustancias y material para la producción de metanfetamina líquida. Los reactores y equipos de síntesis orgánica hallados evidencian la sofisticación del proceso de fabricación de la droga.
El valor estimado de la metanfetamina líquida incautada asciende a más de 553 millones de pesos, y con su aseguramiento, se dio un golpe crucial a las estructuras de los grupos criminales, que emplean estos recursos para financiar sus operaciones y expandir su influencia en el país.
Aseguramientos previos: el narco en Sinaloa sigue siendo un objetivo clave
No es la primera vez que las autoridades federales logran incautaciones de metanfetamina líquida en Sinaloa. El pasado 2 de febrero, agentes de la FGR ya habían decomisado 1,280 litros de esta droga en una empresa de transporte de Culiacán. En ese operativo, se encontraron 64 bidones con 20 litros cada uno de la sustancia, lo que demuestra que el estado sigue siendo uno de los centros neurálgicos para la producción de metanfetamina en México.
Contexto: el narcotráfico y la violencia en Sinaloa
El decomiso realizado el 17 de febrero también refleja el creciente impacto de la guerra entre las facciones del Cártel de Sinaloa, particularmente en municipios como Culiacán. En días recientes, la región vivió una jornada violenta, con balaceras que cobraron la vida de varias personas y generaron pánico en la población.
La operación es un reflejo de la estrategia de seguridad del gobierno mexicano para reducir la violencia y las actividades criminales, a través de intervenciones directas en las zonas donde se encuentra la infraestructura del narco.
Un gran avance en la lucha contra el narcotráfico
Con esta incautación, el gobierno mexicano ha dado un paso importante para desarticular las redes de narcotráfico que operan en Sinaloa. Sin embargo, el desafío sigue siendo enorme, dado que las organizaciones criminales continúan operando con recursos y logística sofisticada. Las autoridades seguirán realizando operativos para reforzar la seguridad y minar las finanzas del crimen organizado.
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