Un nuevo complejo turístico comenzará a levantarse en la zona sur de Cozumel. Se trata de Punta del Mar Cozumel, un proyecto impulsado por la empresa Inmobiliaria Punta Tormentos S.A. de C.V., que ya cuenta con autorización ambiental por parte de la Semarnat. El permiso fue aprobado el 1 de diciembre de 2025, después de un proceso que inició en junio de 2024 y que permite su operación por los próximos 50 años.
El complejo ocupará dos predios que juntos suman casi seis hectáreas, ubicados en el kilómetro 11 de la Antigua Carretera Costera Sur. Una parte colinda con la franja costera y otra se encuentra hacia el interior, en una zona de selva rodeada de vialidades municipales. El diseño combina áreas habitacionales, zonas recreativas y un club de playa.
De acuerdo con el documento técnico presentado a la autoridad, el desarrollo contempla nueve torres de entre cuatro y cinco niveles, con un total de 84 departamentos. También incluye gimnasio, alberca, zona de juegos, canchas deportivas, áreas de descanso, estacionamientos y espacios de servicio. En la parte costera se construirá un club de playa con restaurante, muelles elevados y amenidades para actividades acuáticas.
La empresa afirma que el proyecto solo ocupará 34.63% de la superficie total del predio, por debajo del límite permitido por el Programa de Ordenamiento Ecológico de Cozumel. El resto del espacio se mantendrá como área verde o superficie permeable, lo que ayudará a la infiltración natural del agua en un terreno caracterizado por su suelo kárstico.
El predio tiene antecedentes ambientales. En 2012 la Semarnat autorizó la construcción de vialidades internas para otro proyecto que nunca se concluyó. Esas obras dejaron zonas desmontadas que ahora forman parte del nuevo desarrollo. La empresa registró inspecciones, sanciones y medidas de restauración en ese entonces, las cuales fueron atendidas conforme al expediente.
Impacto al medio ambiente del complejo turístico
En esta zona se encuentran dos ecosistemas importantes: selva mediana subperennifolia y duna costera, ambos considerados sensibles por su biodiversidad. Dentro del predio existe además un pequeño estanque natural donde se han observado tortugas de agua dulce y peces, una formación que se llena con las lluvias y se seca en temporada de sequía. Según el proyecto, esta área no será rellenada ni modificada.
Para construir las edificaciones se realizará un cambio de uso de suelo forestal en una superficie de 2.058 hectáreas, donde se ubicarán las torres y los espacios de servicio. Como compensación, la Semarnat ordenó reforestar y restaurar 3.857 hectáreas, incluyendo zonas que fueron afectadas hace más de una década durante la preparación del proyecto anterior.

Semarnat impone restricciones
La autorización también incluye una serie de restricciones. Están prohibidos el uso de explosivos, la quema de vegetación, la captura o comercialización de especies silvestres y la introducción de flora o fauna invasora. Tampoco se podrán verter aceites o combustibles en el suelo o cuerpos de agua, y las aguas con grasas no podrán filtrarse a áreas permeables. Además, se ordena dar mantenimiento constante a las áreas verdes del predio.
Aunque el proyecto cumple con los límites de ocupación del suelo y densidad permitidos por la normatividad local, su construcción implicará la pérdida de vegetación y la alteración de hábitats donde hoy viven especies propias de la selva y la costa.
Con los permisos ya aprobados, Punta del Mar Cozumel tiene un plazo estimado de cinco años para completarse. La Semarnat y las autoridades locales deberán supervisar que se cumplan las medidas ambientales establecidas.