El envío de remesas con criptomonedas ha crecido de forma acelerada en los últimos años, impulsado por la digitalización financiera y la búsqueda de opciones más rápidas y baratas que los métodos tradicionales.
Para millones de familias que dependen del dinero enviado desde el extranjero, estas herramientas representan una forma de recibir más recursos en menos tiempo y con menos intermediarios.
Transferencias más rápidas y con menos comisiones con criptomonedas
Uno de los principales beneficios de usar criptomonedas para remesas es la velocidad. Las transferencias pueden completarse en minutos, incluso segundos, sin importar fronteras ni horarios bancarios.
A diferencia de los sistemas tradicionales, donde las comisiones pueden superar el 5%, los envíos con activos digitales permiten reducir los costos a menos del 1%, e incluso por debajo del 0.1% cuando se utilizan redes eficientes.
Esto significa que llega más dinero completo a las familias, sin que se diluya en tarifas ocultas.
Stablecoins para evitar la volatilidad
Las stablecoins, como USDT y USDC, se han convertido en las favoritas para el envío de remesas. Su valor está vinculado a monedas fuertes como el dólar, lo que reduce el riesgo de fluctuaciones bruscas.
El proceso suele ser sencillo: el remitente convierte su dinero a una stablecoin, la envía a la billetera digital del destinatario y este la cambia a pesos u otra moneda local. Todo ocurre casi en tiempo real.
Especialistas señalan que estas monedas digitales funcionan como un puente entre las finanzas tradicionales y el ecosistema Web3, con operación 24/7 y alta trazabilidad.
Inclusión financiera para personas no bancarizadas
Las billeteras digitales permiten recibir dinero sin necesidad de una cuenta bancaria. Esto es especialmente relevante en regiones donde una parte importante de la población no tiene acceso al sistema financiero formal.
Con solo un teléfono móvil, las personas pueden recibir remesas, guardar dinero y realizar pagos, sin acudir a sucursales ni cumplir con trámites complejos.
Este acceso directo fortalece la autonomía financiera de miles de familias.
El crecimiento de las remesas cripto a nivel mundial
De acuerdo con Chainalysis, México ocupa el lugar 14 a nivel mundial en volumen de criptomonedas recibidas, con alrededor de 71,200 millones de dólares en 2024. Casi 47% de ese monto se movió a través de stablecoins.
En paralelo, datos de Artemis y Binance Research indican que el volumen de pagos procesados en stablecoins supera ya al de grandes procesadores tradicionales, reflejando una adopción funcional, no experimental.
¿Hay riesgos?
Aunque las ventajas son claras, el uso de criptomonedas para remesas también implica riesgos. Las estafas siguen siendo una amenaza, especialmente aquellas que prometen rendimientos garantizados o ganancias rápidas.
Además, las transacciones en blockchain son irreversibles. Un error al copiar una dirección o enviar fondos a la persona equivocada puede significar la pérdida total del dinero.
La seguridad digital también es clave. Compartir frases de recuperación, usar redes públicas o no activar la verificación en dos pasos aumenta el riesgo de robo.
¿Cómo enviar remesas con criptomonedas de forma segura?
Especialistas en innovación financiera recomiendan operar solo con plataformas reconocidas, verificar cuidadosamente direcciones y montos antes de enviar, y proteger siempre las llaves privadas.
René Escobar Bribiesca, director general y cofundador de EB Capital, señala que el mayor riesgo no es la tecnología, sino la desinformación. Con educación financiera básica y buenas prácticas de seguridad, las criptomonedas pueden ser una herramienta eficiente y confiable.
El impacto de las criptomonedas no se limita al envío de dinero entre personas. En pagos empresariales internacionales, los costos han bajado de rangos de 3–10% a menos del 1%, con liquidez casi inmediata.
También avanzan modelos como la tokenización de activos reales, que permite invertir montos pequeños en oportunidades antes reservadas a grandes capitales.
En México, donde el dinero enviado desde el extranjero es parte esencial de la vida familiar, las criptomonedas ya no son una promesa futura, sino una herramienta cotidiana que busca proteger el esfuerzo de quienes trabajan lejos y sostienen hogares a distancia.
