Un viaje marcado por la tensión regional y la esperanza espiritual
El papa León XIV llegó este domingo al Líbano en una visita cargada de simbolismo, esperanza y tensión política. En medio de los ataques israelíes en zonas del sur del país y una profunda crisis económica y social, el pontífice lanzó un mensaje contundente sobre la necesidad de unidad, reconciliación y valentía para permanecer en la nación a pesar de las adversidades. Su arribo generó un fuerte impacto social, con multitudes que se congregaron desde tempranas horas para recibirlo entre banderas libanesas y vaticanas.

Desde su discurso inicial, el Papa enfatizó que el futuro del país depende de la cohesión de su gente y del esfuerzo por reconstruir el tejido social tras años de conflicto, crisis financiera y migración creciente. Su visita tiene lugar en un momento crítico, en el que la población enfrenta incertidumbre por la escalada entre Israel y Hezbolá, además del deterioro económico que ha golpeado a millones.
Un mensaje claro: quedarse es un acto de valentía
Durante su discurso en el palacio presidencial de Beirut, León XIV exhortó a los libaneses a “quedarse” y no renunciar a su patria a pesar de la grave situación que atraviesa el país. Señaló que la migración masiva, particularmente de jóvenes, ha debilitado la estructura social y la presencia histórica de la comunidad cristiana en Líbano.
El Papa remarcó que “hay veces que es más fácil huir”, pero que reconstruir la nación requiere visión y compromiso. Su mensaje resuena especialmente en un país donde, según el centro de investigación Al Doualiya, cerca de 800,000 libaneses han emigrado entre 2012 y 2024 debido a la falta de oportunidades, la inseguridad y la crisis económica.
Líbano: un país en crisis continua
El Líbano enfrenta desde 2019 una sucesión de crisis que incluyen el colapso financiero, el aumento de la pobreza, la destrucción causada por la poderosa explosión del puerto de Beirut en 2020, y más recientemente el conflicto entre Hezbolá e Israel, que ha dejado severas afectaciones principalmente en el sur del país.
A ello se suma la carga humanitaria generada por la presencia de un millón de refugiados sirios y palestinos, lo cual ha tensionado aún más el ya limitado acceso a recursos y servicios básicos.
Los dirigentes libaneses temen una posible intensificación de ataques israelíes, especialmente tras la última ofensiva del año pasado, que devastó zonas enteras del sur y generó nuevas olas de desplazamiento interno.
El Papa: Un llamado global a la paz y a la solución de dos Estados
En declaraciones realizadas durante su vuelo hacia el Líbano, León XIV reiteró la postura histórica del Vaticano en torno al conflicto entre israelíes y palestinos. Subrayó que la solución de dos Estados es “la única solución capaz de resolver el conflicto”, destacando que la violencia solo abre nuevas heridas y prolonga el sufrimiento de ambos pueblos.
El Papa insistió en condenar los actos violentos realizados en nombre de la religión y advirtió que el número creciente de conflictos en el mundo representa un peligro para el futuro de la humanidad. Su mensaje intenta reforzar la necesidad de diplomacia, diálogo y reconciliación en una región sacudida por enfrentamientos constantes.
Actividades de la visita: un recorrido de fe, memoria y solidaridad
El itinerario del papa León XIV en el Líbano se extenderá hasta el martes y abarcará cinco ciudades y pueblos, aunque no visitará el sur debido a los bombardeos recientes. Su agenda incluye actividades religiosas, encuentros con autoridades y momentos de acompañamiento emocional para comunidades afectadas por las crisis.
Entre sus actos más significativos destacan:
- Una oración especial en el lugar de la explosión del puerto de Beirut, donde murieron 200 personas en 2020.
- Una misa multitudinaria al aire libre en el paseo marítimo de Beirut.
- Una visita a un hospital psiquiátrico, donde personal y pacientes esperan su presencia como un gesto de esperanza y apoyo.
La seguridad se reforzó para su llegada con unidades del ejército libanés y fuerzas internas desplegadas en rutas clave. Su convoy atravesará zonas dominadas por Hezbolá, donde se espera una recepción organizada por el movimiento juvenil Imam Mehdi.
Un mensaje que busca unir a un país fracturado
La visita del papa León XIV llega en un momento decisivo para el Líbano. Su llamado a no abandonar el país, a sanar heridas colectivas y a apostar por la reconciliación intenta generar fortaleza en una población cansada pero resiliente. Mientras el Líbano enfrenta un panorama incierto, el mensaje de paz del pontífice intenta servir como un punto de inflexión espiritual y emocional en medio de la adversidad.