VIH: Avanza detección de casos en etapas tempranas, en la península de Yucatán

El 56% de los nuevos diagnósticos de VIH se detectan en estadio 1, lo que permite iniciar tratamiento a tiempo y reducir los casos avanzados en la región.

Este 1 de diciembre, en el marco del Día Mundial de la Lucha contra el Sida, la península de Yucatán presenta un panorama alentador en la atención del VIH. Los casos de personas portadoras con el virus ahora están siendo detectados de manera más oportuna, en estadios tempranos, lo que permite iniciar tratamientos a tiempo, mejorar la calidad de vida de los pacientes y reducir el riesgo de desarrollar sida.

De acuerdo con los datos de vigilancia epidemiológica con corte al 15 de noviembre de 2025, los diagnósticos en estadio 1 incrementaron un 9% en comparación con el año anterior, mientras que los casos en estadios avanzados se redujeron un 7 por ciento.

Hasta este último corte, la región acumula 1,695 personas diagnosticadas con VIH en lo que va del año. Quintana Roo concentra la mayor carga con 1,035 casos, seguido de Yucatán con 493 y Campeche con 167.

A nivel regional, el 56% de los casos fueron detectados en estadio 1, cuando la infección puede controlarse con mayor eficacia mediante el tratamiento antirretroviral. En contraste, solo el 6 por ciento de los casos fueron detectados en estadio 4, es decir, cuando la enfermedad ha evolucionado a un cuadro de síndrome de inmunodeficiencia adquirida (sida).

Detección oportuna cambia el pronóstico

El cambio en el comportamiento de la enfermedad refleja un mayor acceso a pruebas, campañas de prevención más constantes y una mejor cultura de detección temprana. En Quintana Roo, por ejemplo, 658 personas fueron diagnosticadas este año en estadio 1, mientras que solo 69 ya se encontraban en una fase avanzada de la enfermedad.

En Yucatán, 248 casos se ubicaron en el estadio inicial y 30 en estadio avanzado. Mientras que en Campeche, 58 fueron detectados de manera temprana y nueve ya presentaban sida.

En comparación con el año pasado, cuando la península acumuló 1,626 casos, en este año se observó un incremento en los diagnósticos de VIH. Sin embargo, este aumento presenta un cambio positivo en el perfil de detección y es que cada vez más personas conocen su estado de salud de manera oportuna y son menos quienes llegan a los servicios médicos en etapas críticas de la enfermedad.

VIH: Avanza detección de casos en etapas tempranas, en la península de Yucatán
VIH: Avanza detección de casos en etapas tempranas, en la península de Yucatán

Una lucha que requiere atención

Para el infectólogo Alejandro Muñiz, las cifras reflejan un panorama alentador en la región. Sin embargo, aún hay casos que siguen siendo diagnosticados de forma tardía, lo que sigue siendo el principal problema de salud pública, particularmente en estados como Quintana Roo que ocupan los primeros lugares en incidencia de contagios no solo a nivel peninsular sino en todo el país.

“Hay estados como Quintana Roo que tienen una realidad social y geográfica muy particular. Hay una población flotante muy grande, personas que vienen a trabajar por temporadas o que viven de manera informal, muchas sin acceso a servicios médicos constantes. Eso afecta directamente la posibilidad de hacerse una prueba a tiempo”, explicó.

Aunado a eso, advierte que el estigma hacia el VIH sigue presente y actúa como una barrera silenciosa.

“Muchas personas tienen miedo de hacerse la prueba porque no quieren que los señalen. Ese miedo, sumado a la falta de información y la baja percepción de riesgo, provoca que el diagnóstico llegue cuando ya hay un daño considerable al sistema inmunológico”, detalló.

Muñiz señala que cuando una persona inicia tratamiento con un conteo de CD4 menor a 200 células, los riesgos para su salud se incrementan.

“Ese conteo significa que el virus ya ha debilitado fuertemente las defensas del cuerpo. Aumenta el riesgo de infecciones oportunistas, como tuberculosis o neumonía severa, y puede comprometer de forma irreversible la calidad de vida del paciente”, advirtió.

El infectólogo reiteró que, con el diagnóstico tardío, se pierde la oportunidad de iniciar el tratamiento de manera preventiva, cuando es más efectivo y menos riesgoso.

“Cuando el virus se identifica a tiempo, el tratamiento permite llevar una vida completamente normal, e incluso alcanzar la indetectabilidad. Pero si se llega tarde, la carga del cuerpo y del sistema de salud es mucho mayor”.

INDETECTABILIDAD, UN OBJETIVO ALCANZABLE

El infectólogo Alejandro Muñiz explicó que gran parte del problema en los casos de los pacientes con VIH que no alcanzan los niveles de indetectabilidad deriva de la irresponsabilidad individual en el seguimiento del tratamiento médico.

“No se trata de falta de medicamentos ni de acceso. Se trata, muchas veces, de personas que abandonan el tratamiento por descuido, por desinformación o por desinterés en su propia salud. Es muy duro decirlo, pero es una realidad que enfrentamos a diario”, dijo.

Explicó que cuando un paciente sigue correctamente su esquema de tratamiento antirretroviral (TAR), es totalmente posible alcanzar y mantener una carga viral indetectable en cuestión de semanas. Sin embargo, cualquier interrupción en la toma de medicamentos, por días o incluso por horas, puede provocar un rebote en la carga viral e incluso desarrollar resistencia a los fármacos.

“No es un tratamiento opcional. Es como si un paciente con diabetes dejara de aplicarse insulina porque se siente bien. El VIH no da tregua. Si no se sigue al pie de la letra, el virus toma ventaja desarrollando incluso la capacidad de resistir al mismo tratamiento”, advirtió.

El especialista lamentó que algunos pacientes abandonan el tratamiento apenas sienten mejoría o por confiar en falsas creencias sobre curas milagrosas.

“Hemos visto casos donde la persona logra la indetectabilidad, pero después deja el tratamiento pensando que ya está curada, y meses después regresa con una carga viral altísima. Ahí es donde el virus se vuelve más agresivo y, en muchos casos, resistente”.

Entre los principales factores que afectan la adherencia al tratamiento se encuentran la falta de seguimiento médico, el estigma social, la depresión, y en algunos casos, el consumo de drogas o alcohol.

“Lo que falta es un compromiso real del paciente con su salud y con la comunidad. Alcanzar la indetectabilidad no solo protege a quien vive con VIH, también impide la transmisión a otras personas”, dijo.

El especialista, recordó la importancia del principio “Indetectable es igual a Intransmisible”, una estrategia global para reducir el estigma y promover el diagnóstico temprano y el apego al tratamiento.

“Una persona con VIH en estado indetectable no transmite el virus por vía sexual, pero para lograrlo se necesita constancia, responsabilidad y un compromiso de por vida”, explicó.

LENACAPAVIR, EL FUTURO EN LA PREVENCIÓN DEL VIH

A más de 40 años de haber sido notificado el primer caso de VIH en el mundo, la industria farmacéutica ha trabajado intensamente en el desarrollo de medicamentos y vacunas para prevenir la infección. Todo parece indicar que tantos años de investigación han dado frutos con la creación de la vacuna Lenacapavir.

Esta vacuna desarrollada por la farmacéutica Gilead ha demostrado en sus estudios clínicos tener una eficacia del 100 por ciento y consiste en la aplicación de dos inyecciones cada seis meses para prevenir el contagio del VIH en pacientes sanos.

El costo de cada vacuna es de 400 mil pesos, lo que significa que el tratamiento tendría un costo de 800 mil pesos al año para una persona. Sin embargo, la farmacéutica se encuentra negociando con países como México, Brasil, Argentina y Perú en donde el índice de contagio del VIH es mayor, para venderlos a un precio más accesible.

“Se ha hablado mucho de esta vacuna y podría ser una buena herramienta que supliría la Profilaxis de Pre Exposición, pero aquí en México tendría que ser avalada por los órganos correspondientes y sobre todo, que el gobierno esté interesado destinar recursos para adquirir esta vacuna”, mencionó Alejandro Múñiz.

¿CÓMO PREVENIR EL VIH?

  • Hacerse la prueba del VIH
  • Limitar la cantidad de parejas sexuales que tiene
  • Usar condones de látex cada vez que tiene relaciones sexuales.
  • Hacerse la prueba y recibir tratamiento para infecciones de transmisión sexual
  • No inyectarse drogas
  • Hablar con su profesional de la salud sobre tratamientos preventivos
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