Un operativo encabezado por el Gabinete de Seguridad logró el aseguramiento de más de una tonelada de fentanilo en Sinaloa, considerado el decomiso más grande en la historia del combate al narcotráfico en México. El golpe afecta directamente a las operaciones del Cártel de los Beltrán Leyva y su principal operador, Fausto Isidro Meza Flores, alias El Chapo Isidro.
Con esta acción, el Gobierno de México reafirma su compromiso de debilitar a los principales grupos criminales que lideran la producción y distribución de esta droga, cuyas repercusiones se extienden a nivel internacional.
¿Qué ocurrió en los operativos de Sinaloa?
El operativo, realizado en dos fases, tuvo lugar en los municipios de Guasave y Ahome, con la participación de la Secretaría de Marina (Semar), Guardia Nacional (GN), Sedena, y la Fiscalía General de la República (FGR).
Primer operativo en Guasave: Sospechas en las calles
En el municipio de Guasave, un vehículo con actitud sospechosa fue interceptado en la calle Raúl Cervantes Ahumada. Los ocupantes intentaron evadir a las autoridades, pero fueron detenidos tras una breve persecución.
Dentro del automóvil, las autoridades encontraron:
- Dos kilos de pastillas de fentanilo.
- Tres armas de fuego cortas.
- Nueve cargadores abastecidos.
- Equipos de radiocomunicación.
Los detenidos, identificados como Elier Jassiel Esquerra Félix y Javier Alonso Vázquez Sánchez, alias Tito, fueron puestos a disposición del Ministerio Público para determinar su situación legal.
Segundo operativo en Ahome: Laboratorios y cargamentos listos
En Ahome, una persecución terminó en el aseguramiento de dos inmuebles. Estos sitios, utilizados como laboratorios clandestinos, contenían:
- 11 bultos con 300 kilos de fentanilo.
- 800 kilos más listos para su transporte en una camioneta.
- Equipo para la producción de drogas sintéticas, como básculas y revolvedoras industriales.
Ambos domicilios quedaron bajo resguardo mientras se profundizan las investigaciones.
El impacto del fentanilo en el mercado negro
El decomiso de más de una tonelada de fentanilo equivale a 20 millones de dosis, que estaban destinadas principalmente a los mercados de Estados Unidos y Canadá. En estos países, el consumo de esta droga ha generado una crisis de salud pública debido a su alta toxicidad y facilidad de producción.
Valor económico del decomiso
Con un valor estimado de 400 millones de dólares (alrededor de 8,132 millones de pesos mexicanos), este decomiso es un golpe devastador para las finanzas del narcotráfico, especialmente para la estructura dirigida por El Chapo Isidro.
¿Quién es Fausto Isidro Meza Flores, alias “El Chapo Isidro”?
Conocido como uno de los principales operadores del Cártel de los Beltrán Leyva, El Chapo Isidro ha diversificado sus actividades en los últimos años, consolidándose como una figura clave en la producción de fentanilo. Este líder criminal ha mantenido alianzas estratégicas con Los Chapitos en su lucha contra la facción rival de La Mayiza.
El mensaje detrás del decomiso: Un golpe a la violencia
La región norte de Sinaloa, conocida por su importancia estratégica para el tráfico de drogas, ha sido escenario de violentas disputas entre facciones del Cártel de Sinaloa. Este aseguramiento masivo no solo afecta las operaciones logísticas del narcotráfico, sino que también busca reducir los índices de violencia en el estado.
Reorganización de la estrategia de seguridad
En este contexto, el titular de la SSPC, Omar García Harfuch, anunció un enfoque renovado para enfrentar el narcotráfico en Sinaloa, destacando:
- Mayor vigilancia en Culiacán y Mazatlán.
- Uso intensivo de inteligencia policial.
- Coordinación con fuerzas federales y estatales.
Un paso adelante en la lucha contra el fentanilo
Este decomiso histórico refuerza el compromiso del Estado mexicano para combatir el narcotráfico y proteger a la ciudadanía. Sin embargo, también evidencia los retos persistentes en la lucha contra las drogas sintéticas, cuya producción y distribución han incrementado a niveles alarmantes.
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