En la obra de Rodolfo Usigli, Octavio Paz y otros grandes pensadores mexicanos, la gesticulación y el fingimiento emergen como metáforas de una sociedad atrapada en la apariencia. Este legado, que parece estar intrínsecamente arraigado en nuestra política, cobra especial vigencia en la actualidad, en un México liderado por la autoproclamada “renovación moral” de la Cuarta Transformación.
El México de Octavio Paz: una mentira estructural
Octavio Paz, en La mentira de México (1943), expuso de manera cruda:
«Somos gesto y apariencia; nada, ni siquiera en el arte, se enfrenta a la verdad.»
Décadas después, esta declaración sigue resonando. En un país donde las instituciones luchan por legitimar su existencia, las denuncias de hipocresía y los intentos por maquillar la verdad no solo persisten, sino que se han perfeccionado en el escenario político contemporáneo.
Ricardo Monreal: hipocresía y sumisión en un solo acto
Un reciente episodio encapsula la esencia del México actual: Ricardo Monreal, en un despliegue de poder y exceso, usó un helicóptero para recorrer su circunscripción, solo para recibir un llamado de atención de la presidenta. Su disculpa, cargada de tonos sumisos, demostró que, aunque el legislador puede ser hipócrita, no es ingenuo.
La política mexicana, más que en los hechos, parece moverse en un teatro donde el guion exige gestos de contrición pública y sumisión al líder de turno.
El caso Yasmín Esquivel: ¿hacia una justicia basada en premios?
La figura de Yasmín Esquivel Mossa, ministra de la Suprema Corte de Justicia, es otro ejemplo de cómo las instituciones y el liderazgo se ven atrapados en el juego de la apariencia.
Un historial de reconocimientos dudosos
Esquivel ha acumulado al menos 12 premios y distinciones, incluyendo doctorados honoris causa otorgados por instituciones de méritos cuestionables. Uno de los más recientes es el “Premio Internacional ALMA 2024 en Procuración de Justicia”, concedido por la Alianza de Líderes Mundiales, una organización que, a pesar de tener presencia en 20 países según su propia descripción, cuenta con tan solo 240 seguidores en su sitio web.
Para Esquivel, este tipo de premios parecen ser una estrategia para limpiar su imagen, empañada por el escándalo de plagio en su tesis de licenciatura y doctorado. En su discurso de aceptación, dijo:
«México necesita líderes empoderados que fortalezcan vínculos y contribuyan al progreso de la nación.»
La elección del próximo Poder Judicial
Con la inminente reforma judicial, donde el “pueblo sabio” elegirá a las figuras clave de la justicia, Esquivel se perfila como una candidata fuerte, promovida por una maquinaria mediática afín al gobierno. Esto plantea preguntas sobre la independencia judicial y el impacto de estas elecciones en la imparcialidad del sistema.
Entre la transa y la farsa: el legado de la Cuarta Transformación
Jesús Garza Onofre y Javier Martín Reyes, en su análisis Entre la transa y la farsa, señalan cómo el uso de reconocimientos simbólicos y gesticulaciones vacías se ha convertido en una herramienta para legitimar el poder. En un país donde la percepción es más importante que la realidad, los líderes moldean su imagen pública a través de narrativas que poco tienen que ver con la verdad.
¿Renovación moral o perpetuación de viejas prácticas?
La Cuarta Transformación prometió acabar con la hipocresía del pasado, pero los episodios recientes muestran que el teatro político sigue tan activo como siempre. Desde los helicópteros hasta los premios internacionales de dudosa procedencia, la gesticulación continúa siendo la protagonista en un México que sigue buscando, desesperadamente, una verdad que no solo se diga, sino que también se viva.
¡Únete a nuestro canal de Telegram! Las noticias más relevantes del día directamente en tu dispositivo móvil.
