Tres muertos y once heridos tras el desplome del avión de UPS
Una escena de horror se vivió la tarde del martes en Louisville, Kentucky, cuando un avión de carga de la empresa UPS se estrelló durante el despegue en el Aeropuerto Internacional Muhammad Ali. El accidente dejó un saldo preliminar de tres personas muertas y once heridas, según confirmaron las autoridades locales.
La aeronave, que tenía como destino Honolulu, se precipitó segundos después de elevarse. Testigos aseguraron que el avión comenzó a inclinarse hacia un costado antes de impactar violentamente contra el suelo, generando una explosión que encendió una enorme bola de fuego visible desde varios kilómetros.
Los equipos de emergencia llegaron de inmediato al sitio, donde el fuego consumía parte del fuselaje. Entre las víctimas mortales se encontrarían miembros de la tripulación, aunque las autoridades aún no han revelado sus identidades.
Las víctimas: entre la esperanza y la tragedia
Los once heridos fueron trasladados a hospitales cercanos, algunos en estado crítico. Paramédicos, policías y bomberos trabajaron contrarreloj para rescatar a quienes permanecían atrapados entre los restos calcinados de la aeronave.
Vecinos cercanos al aeropuerto relataron los momentos de pánico. “Sentimos una vibración muy fuerte y después una explosión enorme. El cielo se volvió naranja”, dijo un residente del área norte de Louisville.
Las autoridades extendieron una orden de resguardo en interiores para las zonas cercanas al aeropuerto, ante el temor de que el humo o materiales peligrosos pudieran afectar la salud de los habitantes.
Un incendio que puso en alerta a toda la ciudad
El Departamento de Policía Metropolitana de Louisville confirmó que el impacto provocó un incendio de grandes proporciones, que tardó más de una hora en ser controlado. Los bomberos utilizaron espuma especial para combatir las llamas generadas por el combustible del avión.
Fotografías publicadas en redes sociales mostraban una columna de humo negro elevándose desde la zona de carga, mientras decenas de vehículos de emergencia intentaban contener el siniestro.
La Administración Federal de Aviación (FAA) informó que el accidente ocurrió alrededor de las 17:15 horas, poco después del despegue, y que se inició una investigación conjunta con la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB).
UPS y el gobernador de Kentucky lamentan la tragedia
La empresa UPS emitió un comunicado en el que expresó su pesar por la tragedia y aseguró estar colaborando con las autoridades. “Estamos devastados por esta pérdida. Nuestra prioridad es la seguridad y el bienestar de nuestra tripulación y la comunidad”, señaló la compañía.
El gobernador de Kentucky, Andy Beshear, también reaccionó a través de la red social X: “Los socorristas están en el lugar. Por favor, recen por los pilotos, la tripulación y todos los afectados. Compartiremos más información pronto”.
El aeropuerto Muhammad Ali suspendió temporalmente sus operaciones para facilitar las labores de rescate y limpieza, lo que provocó retrasos y cancelaciones en varios vuelos.
Las causas del siniestro: una investigación en curso
Aunque todavía no hay una causa oficial, los primeros reportes apuntan a una posible falla mecánica durante la maniobra de despegue. Expertos en aviación indicaron que la pérdida de potencia en los motores o un error de equilibrio en la carga podrían haber sido determinantes.
La FAA confirmó que los registradores de vuelo, conocidos como cajas negras, fueron recuperados y serán analizados en las próximas horas para determinar con precisión lo ocurrido.
Louisville, una comunidad en duelo
La tragedia ha dejado un profundo dolor en la comunidad de Louisville, donde UPS opera uno de sus centros logísticos más importantes en Estados Unidos. Vecinos, trabajadores y familiares se reunieron en las inmediaciones del aeropuerto para rendir homenaje a las víctimas y colocar flores en señal de luto.
“Es una pérdida enorme. Estas personas eran parte de nuestra familia laboral”, declaró un empleado de la compañía. Mientras tanto, las autoridades locales prometieron apoyo psicológico y económico a los afectados.
El accidente ha reabierto el debate sobre las medidas de seguridad en vuelos de carga y la necesidad de reforzar la supervisión técnica de las aeronaves que transportan materiales sensibles o pesados.
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