Blake Lively, reconocida mundialmente por su papel en Gossip Girl, presentó una demanda ante el Departamento de Derechos Civiles de California contra su compañero de reparto y director, Justin Baldoni. Según la actriz, no solo sufrió acoso sexual durante el rodaje de Romper el círculo, sino que posteriormente fue víctima de una campaña de desprestigio orquestada por Baldoni y su equipo.
La cinta, basada en el libro de Colleen Hoover, aborda relaciones abusivas, un paralelismo inquietante con las acusaciones de Lively. A continuación, analizamos los puntos más impactantes de la denuncia que está remeciendo a Hollywood.
El expediente judicial
La denuncia detalla que, a principios de 2024, Lively convocó a una reunión con el equipo de producción para abordar el «ambiente laboral hostil». La actriz presentó una lista de condiciones para continuar en el proyecto, entre ellas:
- Prohibición de mostrar imágenes explícitas o videos inapropiados en su presencia.
- Abstenerse de realizar comentarios sobre experiencias sexuales personales o el cuerpo de Baldoni.
- Respetar la memoria de su padre fallecido.
Sin embargo, según la denuncia, Baldoni respondió lanzando una campaña para dañar su reputación.
La campaña de desprestigio
Documentos legales incluyen miles de mensajes de texto y correos electrónicos intercambiados entre Baldoni y su equipo de relaciones públicas. Estos textos revelan un plan estratégico para “enterrar” a Lively en los medios.
En uno de los mensajes, Jennifer Abel, experta en relaciones públicas, escribió: “Sabes que somos capaces de hundir a cualquiera”. Estas acciones resultaron en graves consecuencias para la actriz:
- Su línea de productos capilares experimentó una caída del 78 % en ventas.
- La prensa la calificó como “autoritativa” y “difícil de trabajar”.
- Videos del pasado resurgieron para atacarla, como una entrevista de 2016 donde reaccionó bruscamente ante un comentario sobre su embarazo.
Reacciones de la industria
El conflicto no solo afectó a Lively. Colleen Hoover, autora del libro, también tuvo desacuerdos con Baldoni, al punto de evitar eventos promocionales conjuntos. Además, varios miembros del elenco, incluido Ryan Reynolds, esposo de Lively, dejaron de seguir a Baldoni en redes sociales, una acción que los fanáticos interpretaron como un respaldo a la actriz.
Un impacto emocional devastador
En la demanda, Lively detalla cómo las acciones de Baldoni la afectaron profundamente. Además de los daños a su carrera, la actriz asegura haber sufrido “graves trastornos emocionales” que siguen repercutiendo en su vida diaria.
El caso promete ser uno de los más polémicos de Hollywood en años recientes, planteando preguntas sobre el poder de las campañas de difamación en la era digital y la protección de los actores en el set.
¿Qué sigue para Blake Lively?
Mientras la demanda avanza, Lively continúa recibiendo apoyo público de fanáticos y colegas. Este caso podría marcar un precedente importante en la industria del entretenimiento, visibilizando el abuso de poder y las estrategias de manipulación mediática.
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