El piloto británico explica el contexto de sus declaraciones
Lewis Hamilton dejó claro este jueves que no se arrepiente de haber fichado por Ferrari, contradiciendo la interpretación que surgió tras sus comentarios posteriores al Gran Premio de Las Vegas. El siete veces campeón del mundo reconoció que sus palabras estuvieron cargadas de frustración, pero reafirmó su entusiasmo por lo que viene para la escudería italiana.
Hamilton llegó a Ferrari en enero tras su salida de Mercedes, una de las decisiones más mediáticas de los últimos años en la Fórmula 1. El movimiento generó grandes expectativas y también presión: Ferrari buscaba recuperar protagonismo, mientras que Hamilton pretendía reencontrarse con el desempeño que lo llevó a dominar gran parte de la última década.
En Las Vegas, la frustración fue evidente. Hamilton salió último en la parrilla y terminó en décimo lugar, aunque posteriormente ascendió al octavo tras la descalificación de los dos McLaren. Tras la carrera, aseguró que era “la peor temporada de su vida” y que no tenía deseos de que llegara 2026, año en el que la F1 ingresará en una nueva era tecnológica.
Sin embargo, desde Qatar, el piloto ofreció una versión más calmada: sus palabras reflejaron un momento de tensión más que un juicio sobre su futuro.
Las frustraciones y realidades detrás de una temporada difícil
Hamilton reconoció que sus declaraciones posteriores a la carrera en Las Vegas no representaban lo que realmente siente respecto a su futuro con Ferrari. Según explicó, al término de una temporada larga, mentalmente exigente y sin los resultados esperados, es normal que los pilotos experimenten agotamiento y frustración.
“A menudo hay mucha frustración al final de las carreras, sobre todo cuando las cosas no han ido bien”, admitió. El británico también destacó que el final de temporada suele coincidir con un descenso general de energía en todos los pilotos, no solo en él.
Lo cierto es que Ferrari no ha ganado ninguna carrera en todo el año, y Hamilton aún no ha logrado subir al podio, una situación inédita en su trayectoria reciente. La combinación de estos factores intensificó las emociones del piloto tras la carrera en Las Vegas, un circuito en el que Ferrari esperaba mejores resultados.
Aun así, Hamilton insiste en que su fichaje por Ferrari fue la decisión correcta. La pasión interna del equipo, la determinación por construir un auto competitivo y la cultura que rodea a la escudería han sido, según él, algunos de los aspectos positivos que marcaron su primera temporada de adaptación.
Hamilton mantiene su compromiso con Ferrari
Lejos de cualquier duda, Hamilton declaró estar “emocionado por ver lo que el equipo construye el año que viene” y confiado en que 2025 será un año de mayor estabilidad y crecimiento colectivo. Enfatizó que su entusiasmo no ha mermado y que seguirá construyendo junto a Ferrari, incluso después de una temporada sin triunfos.
El piloto también señaló que no es extraño que, al final del calendario, los pilotos deseen principalmente descansar, desconectarse y volver a ver a sus familias. “Normalmente no tienes mucha energía al final del año”, comentó. Para él, este desgaste es parte natural de la competencia al más alto nivel.
En Ferrari, su llegada se interpreta como un proyecto de mediano plazo. Aunque los resultados inmediatos no llegaron, el equipo ve a Hamilton como una pieza clave para la transformación rumbo a la nueva reglamentación de 2026, donde la nueva era de motores podría redefinir el equilibrio de poder en la F1. Hamilton, según sus palabras, sigue comprometido con ese camino.
Lewis Hamilton: Qué significa esta aclaración para Ferrari y la Fórmula 1
La reafirmación de Hamilton llega en un momento crucial para Ferrari. El equipo vive una etapa de reconstrucción y necesita estabilidad interna para preparar el próximo prototipo. Las declaraciones del británico envían un mensaje importante: no hay duda ni arrepentimiento, solo trabajo pendiente.
Para la Fórmula 1, las palabras de Hamilton reflejan la intensidad emocional del deporte y las expectativas que recaen sobre los grandes nombres. Sus frustraciones tras un mal fin de semana contrastan con la disciplina y visión a largo plazo que ahora vuelve a manifestar.
La temporada no ha entregado los resultados esperados, pero Hamilton sostiene que su viaje con Ferrari recién comienza. Lo que viene será decisivo para demostrar si esta unión histórica puede trascender los desafíos iniciales y aspirar nuevamente al título.
